Por tercera vez consecutiva la Plataforma de Afectados por Cocinas Fantasma de Madrid y la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) se han manifestado contra «la permisividad del Gobierno municipal» ante la proliferación de cocinas industriales junto a viviendas en los barrios de la ciudad, esta vez en el distrito de Tetuán.
La protesta ha tenido lugar en la calle José Calvo 10 este domingo 12 de marzo a las 12:00 horas. A la misma han asistido la ministra de Industria, Turismo y Comercio y candidata del PSOE a la Alcaldía de Madrid, Reyes Maroto; el portavoz municipal de campaña de Más Madrid, Edu Rubiño; la concejala de Más Madrid, Mar Barberán; y la concejala del Grupo Mixto, Marta Higueras, entre otros.
Los afectados por las cocinas fantasma del entorno de la calle José Calvo, en el distrito madrileño de Tetuán, denuncian que llevan soportando las molestias inherentes a las cocinas fantasma desde junio de 2020, entre obras y puesta en funcionamiento inmediatamente después del levantamiento del confinamiento.
Malos olores, humos, ruidos, atascos, suciedad, ocupación de calzada y acera por repartidores en moto y bicicleta, la carga y descarga de grandes camiones, invasión de las entradas de garajes y portales, tanto de repartidores que carecen de un lugar de espera para recibir las comandas como de otros vehículos que traen mercancía o incluso de clientes que vienen a recoger sus propios pedidos de comida.
Todo ello, inciden, «con la permisividad de la Junta de Distrito, las áreas municipales afectadas y el propio equipo de Gobierno del alcalde José Luis Martínez-Almeida, cuya única solución parece ser culpar a la oposición por no aprobar la Modificación de las Normas Urbanísticas del PGOUM a pesar de que dentro de esta las cocinas agrupadas representan un pequeñísimo apartado».
Cansados de la «inacción» del Ayuntamiento de Madrid ante «un problema que está causando daños en su salud», los damnificados reunidos en la Plataforma de Afectados por las Cocinas Fantasma en Madrid, con el apoyo de la FRAVM, se han concentrado ante la puerta misma del número 10 de la calle José Cavo, una concentración vecinal de protesta. El acto ha contado con el apoyo de la Asociación Vecinal Cuatro Caminos – Tetuán, la Asociación Vecinal y Huerto de La Ventilla y Radio Almenara, así como de Ecologistas en Acción y la Plataforma ¡Por el derecho a la ciudad!
La Plataforma denuncia que Tetuán es el distrito de Madrid que más cocinas fantasma concentra, «con la pasividad de su Junta Municipal, presidida por el PP». En la calle José Calvo, 10 se concentran 21 cocinas en una nave ciega de más de 800 metros cuadrados que antes era un almacén de papelería con zona de carga y descarga interior y actualmente está ocupada por la marca de comida rápida VICIO, del exconcursante de Master Chef Aleix Puig.
Denuncian que la empresa privada Cooke Lane, propietaria de las instalaciones,» ha sido favorecida por el Ayuntamiento de Madrid al reservarla 9 metros lineales de suelo público en la calzada frente a su puerta, para carga y descarga de 8 a 24 horas todos los días del año, privando a los vecinos de un amplio espacio de aparcamiento en esta estrecha calle».
Pero esta no es la única instalación de cocinas fantasma en Tetuán. Otras se encuentran en las calles Morando 6, Algodonales, Araucaria y Sorgo y la amenaza de dos más se cierne sobre las calles Salamanca 21 y Santa Valentina 3, cuyos vecinos han dado la voz de alarma de lo que se les viene encima tras conocer las obras que se querían ejecutar o que se han ejecutado durante el período de moratoria en la concesión de licencias.
La Plataforma de Afectados por las Cocinas Fantasma de Madrid lamenta “la falta de sensibilidad del Ayuntamiento ante la depredación de este tipo de negocios, que se escudan en generar puestos de trabajo cuando la realidad es que sólo engrosan sus cuentas de beneficios gracias a empleos mal pagados y en pésimas condiciones laborales”, además de «actuar como competencia desleal contra los hosteleros del barrio. Reclamamos el cierre de todas las cocinas fantasma que se encuentran en zonas residenciales actualmente y su traslado a polígonos industriales», así como una normativa específica que limite su implantación según los planteamientos presentados por la FRAVM en representación de los afectados de Madrid en 2021 acompañados de más de 3.000 firmas recogidas. «Si en ciudades como Barcelona se puede hacer ¿por qué en Madrid no?», concluyen.
