Las Juventudes Socialistas de Latina (JSL) rechazan la petición que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, formuló el pasado domingo en la conferencia de presidentes autonómicos, solicitando el regreso a clase de los alumnos 15 días antes de finalizar el curso escolar.
Así lo ha indicado la organización juvenil en un comunicado remitido a los medios de comunicación, en el que consideran la medida «inapropiada por varias razones». La primera de ellas, «la más elemental, la sanitaria: el regreso de los jóvenes a los centros escolares para proseguir su formación pondría en riesgo la salud, tanto de alumnos y alumnas como de personal docente y de administración y servicios y, ni que decir tiene, de los convivientes con los menores, pues sería muy difícil controlar aglomeraciones y minimizar el contacto físico a menudo en aulas pequeñas y en grupos con ratios disparadas».
A nivel educativo, «no entendemos el valor formativo de dicha proposición. Regresar una quincena antes de acabar el curso no garantiza que el alumnado reciba una mejor preparación de cara al curso siguiente y, en los casos más señalados por la presidenta madrileña (4º de ESO y 2º de Bachillerato), no contribuye significativamente a la preparación para el cambio de etapa o para la EvAU, respectivamente».
Además, «esa obligatoriedad de hacer los exámenes de manera presencial, además de ser un riesgo para la salud, es contraproducente pues muchos departamentos y centros ya han adaptado sus criterios de calificación sin contemplar exámenes presenciales para la evaluación final, a tenor de las directrices de las instancias educativas regionales coordinadas por el propio Consejero de Educación de la Comunidad de Madrid».
«Hacemos un pequeño excurso para recordar y tomar conciencia de la brecha digital, que supone un retraso educativo para el alumnado en situación vulnerable y pedimos recursos a fin de que toda la juventud madrileña reciba una educación de calidad», exponen.
Desde Juventudes Socialistas de Latina «apelamos a la reconsideración de Ayuso de esta petición que, sospechamos, obedece más a rencillas políticas con el gobierno central que a una búsqueda de la mejora de la calidad formativa en la Comunidad de Madrid e insistimos que nuestro rechazo a la medida obedece fundamentalmente a un afán de protección de la salud pública».