Hasta el próximo otoño, un total de 32.175 metros cuadrados de pavimento se asfaltarán en el distrito de Usera dentro de las labores de la Operación Asfalto que se inician casi todos años durante los meses de verano. En esta edición, un total de 19 calles distribuidas por los siete barrios, en las que el Área de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid invertirá 600.000 euros.
La renovación de calzadas que forman parte de esta nueva pavimentación han comenzado por las calles de Albuñuelas, Antonio López, Bernardino de Antequera o Cristo de la Victoria. También se asfaltarán Cristo de Lepanto, Dolores Sopeña, Francisco Ruano, Íllora, Jesús Montoya y la de Juan Español. Las calles de Justa García, Loyola, Luis de la Torre y Madre Cándida María de Jesús también renovarán su calzada. El listado se completa con la calle de Madridejos, Manuel Muñoz, Montefrío, Padul o Pinsapo.
Calzadas más eficientes
Entre los criterios para priorizar las calzadas a rehabilitar en estas operaciones de asfaltado están el nivel de obsolescencia de las mismas y la intensidad media de tráfico que soportan. Además de ajustarse a criterios de sostenibilidad, evitan deterioros, mejoran la comodidad y seguridad de los usuarios, y disminuyen los niveles sonoros de rodadura y la contaminación del aire.
La campaña general de este 2023 supondrá la utilización de alrededor de 75.000 toneladas de asfalto, de las que buena parte serán mezclas asfálticas más sostenibles frente a las mezclas en caliente tradicionales. Más de la mitad del material utilizado serán mezclas bituminosas semicalientes cuya fabricación y puesta en obra se realiza a una temperatura de unos 30ºC inferior a las mezclas en caliente tradicionales.
Una de las ventajas es que en su fabricación se reducen las emisiones de gases contaminantes, como el CO2 y el SO2, y los compuestos orgánicos volátiles. Además, se reduce la exposición de los trabajadores a humos, hidrocarburos y olores. A ello hay que añadir que la menor temperatura reduce también el consumo energético entre un 11 % y un 5 % y permite trabajar a temperaturas ambientales menores.
En esta campaña se utilizarán unas 40.000 toneladas de mezclas bituminosas semicalientes que se extenderán sobre una superficie de 335.600 m2 (un 53 % de la superficie asfaltada) lo que permitirá dejar de emitir a la atmósfera 177 toneladas de Dióxido de Carbono equivalente (tCO2e).