La Comunidad de Madrid ha diseñado un plan exclusivo que entrará en funcionamiento durante la Cumbre de la OTAN que se celebrará en la capital los próximos días 28 y 29 de este mes y que movilizará un operativo de 600 personas.
Este documento del Gobierno regional se centra en la coordinación de los distintos servicios de Emergencias –bomberos, policías locales, sanitarios y voluntarios de Protección Civil-, así como en el refuerzo de hasta seis líneas de Metro de Madrid para atender una demanda extraordinaria de usuarios. También se habilitará una lanzadera de autobuses que llegará a funcionar las 24 horas del día para conectar con IFEMA, el recinto donde se celebrará esta cita internacional.
El Consejo de Gobierno ha conocido en detalle, durante la reunión mantenida hoy, el informe sobre este plan elaborado desde la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior y en el que se ha estado trabajando durante las últimas semanas desde distintos departamentos y organismos de la Comunidad de Madrid.
La Cumbre de la OTAN, que reunirá en Madrid a 50 delegaciones internacionales entre miembros aliados y países invitados, ha requerido adoptar toda una serie de medidas en materia de seguridad, emergencias, cobertura sanitaria y en el servicio público de transporte, entre otros sectores.
En este sentido, desde el Ejecutivo regional se ha puesto a disposición del Gobierno central un plan de necesidades que permitan llevar a cabo cualquier tipo de intervención en caso de emergencia. En él se incluye la participación de bomberos, policías locales, sanitarios de SUMMA 112 y voluntarios de Protección Civil.
El objetivo es que la Cumbre, que concentrará a numerosos Jefes de Estado, presidentes del Gobierno y primeros ministros, discurra de manera coordinada y segura adoptando acciones extraordinarias adaptadas a las necesidades de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad que velan por los asistentes y la población.
Llamadas atendidas en 80 idiomas
Desde el Centro Coordinador de Emergencias 112 se integrará operativamente a todos los organismos que conforman este dispositivo. Las llamadas recibidas se atenderán en 80 idiomas, gracias a un servicio de tele-traducción simultánea, y una aplicación permitirá, ante cualquier tipo de aviso, localizar el lugar, clasificar su naturaleza, activar los servicios de intervención en caso de que sean necesarios y efectuar la coordinación, compartiendo datos entre los efectivos desplazados, con un enlace físico en la instalación central situada en IFEMA.
Por otra parte, el dispositivo sanitario dirigido por SUMMA112 participará junto al SAMUR-Protección Civil del Ayuntamiento de Madrid, el Equipo de respuesta inmediata de Voluntarios de Protección Civil (ERIVE) y Agrupaciones Municipales de voluntarios de Protección Civil, ante cualquier tipo de posible contingencia.
Servicio especial de transporte público
Durante la Cumbre de la OTAN, Metro de Madrid reforzará las líneas 1, 5, 6 y 10, y si fuera necesario, y acorde a la demanda, las líneas 4 y 9. Además, se incrementará el personal en estaciones, así como en las terminales con conexión con el suburbano del Aeropuerto internacional Adolfo Suárez Madrid-Barajas.
El Consorcio Regional de Transportes, además, ha autorizado un Servicio Especial (SE) de la EMT con motivo de la Cumbre, que consistirá en una lanzadera sin paradas intermedias que estará operativo entre los días 27 y 30 de junio desde la estación de Mar de Cristal hasta la puerta Norte de IFEMA. El horario será desde las 9:00 horas de la mañana hasta las 22:00, a excepción del día 29, que lo hará de manera ininterrumpida durante las 24 horas.
Aquellas personas -organización, personal de IFEMA y medios de comunicación- que accedan a la sede de este evento internacional, tendrán que acreditarse previamente para acceder al recinto en el IES Gabriel García Márquez, cedido por la Consejería de Educación y Universidades, situado en la calle Ayacucho, muy próximo a la estación de Metro de Mar de Cristal.
En cualquier caso, desde la organización se ha advertido con antelación que, por motivos de seguridad, podría verse modificado el transporte público de manera puntual, así como la frecuencia de trenes, o el cierre y control de aforos en determinadas estaciones.