«Los datos hablan por sí solos. En apenas tres años se han creado cinco nuevas universidades privadas en Madrid. Y ya son 13 privadas frente a sólo seis públicas”. Son declaraciones de la secretaria general de la Federación de Enseñanza de CCOO Madrid, Isabel Galvín, a propósito del Proyecto de Ley para la creación de la Universidad de Diseño, Innovación y Tecnología (UDIT) al que el Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid acaba de dar luz verde y que será una realidad una vez se ratifique en el Pleno de la Asamblea.
CCOO pide la “retirada inmediata” de un Proyecto de Ley que, denuncia Galvín, “responde únicamente a un entramado de intereses económicos que nada tienen que ver con la defensa de un modelo público de universidad de calidad o de la mejora del espacio madrileño de educación superior”. Es la misma denuncia que el sindicato realizó cuando la propuesta se sometió a consulta pública en abril de 2021.
Y no es solo CCOO quien se opone a la creación de la UDIT. Todos los informes al respecto -el del Ministerio de Universidades, el del Consejo Universitario de Madrid y el de los Servicios Jurídicos de la propia Comunidad de Madrid- son negativos. “Esto, desgraciadamente, no es sorprendente, ya que no existe un verdadero interés académico en la creación de esta universidad”, advierte Isabel Galvín.
“Basta con ver las distintas dimensiones del actual Escuela Universitaria de Diseño, Innovación y Tecnología, ESNE, con menos de 2.000 estudiantes y una escasa plantilla de profesorado, para darse cuenta que la UDIT no tiene la entidad para ser una universidad de calidad”, expone. De hecho, «no cumple con los criterios del Real Decreto 640/2021, de 27 de julio, de creación, reconocimiento y autorización de universidades y centros universitarios».
En realidad, la creación de la UDIT es la transformación en universidad privada de la actual ESNE, que es a su vez un centro adscrito a la universidad privada Camilo José Cela. Este proceso, de paso de un centro privado adscrito a otra universidad, ya se ha dado en otras ocasiones. Sin ir más lejos, cuando se aprobaron las universidades privadas ESIC Universidad, Universidad Internacional Villanueva, CUNEF Universidad y Universidad Internacional de la Empresa.
Llamamiento a los rectores
Además de la retirada del proyecto de Ley, la Federación de Enseñanza de CCOO Madrid reclama un “pronunciamiento público y contundente” de los rectores de las universidades públicas en contra de «esta política de crecimiento incontrolado del modelo privado de universidad; que cualquier proyecto de creación de una universidad privada cuente necesariamente con la aprobación del Consejo Universitario de la Comunidad de Madrid; la racionalización del mapa de titulaciones, evitando la oferta innecesaria de un mismo título por una universidad pública y por un centro adscrito a ella o por una universidad privada, y que la oferta de plazas de estudios universitarios que reclama la sociedad madrileña sea ofertada con los medios propios de la Comunidad de Madrid de forma directa y no se acuda a un proceso de externalización de la educación superior».
“La enseñanza superior no puede plantearse como una oportunidad de negocio, sino como un derecho del conjunto de la sociedad que debe ser atendido por las universidades públicas”, ha concluido Isabel Galvín.