- El coste total bruto por trabajador a nivel nacional fue de 31.085,76 euros durante 2018, un 1,1% más que en el año anterior.
- El salario anual bruto por trabajador en España aumentó un 0,9% y se situó en 23.003,23 euros.
El salario bruto anual en la Comunidad de Madrid se situó en 2018 en 27.559,74 euros de media, lo que supone un incremento de un 1,2% respecto al año anterior, tres décimas más que en el conjunto de España, lo que hace que sea la región con mayor sueldo medio del país.
Así se desprende de la Encuesta Anual de Coste Laboral (EACL), que completan los obtenidos a partir de la Encuesta Trimestral de Coste Laboral (ETCL). También se indica que, a nivel nacional, el salario anual bruto por trabajador aumentó un 0,9% y se situó en 23.003,23 euros.
A la Comunidad de Madrid les siguen, como regiones con los mayores salarios medios de España, el País Vasco con 27.127,33 euros y Navarra con 24.990,87 euros. En el lado contrario se encuentran Extremadura con 18.669,76 euros y Canarias con 19.499,07 euros.
En cuanto al coste laboral por trabajador en España en términos brutos, este fue de 31.085,76 euros en 2018. Este coste representa un incremento del 1,1% respecto del año anterior. Si se restan las subvenciones y deducciones que se recibieron de las Administraciones Públicas, se obtiene un coste neto de 30.883,44 euros, con un crecimiento interanual del 1,1%.
Por comunidades autónomas, el coste total por trabajador, en términos brutos, en la Comunidad de Madrid fue de 36.749,67 euros durante 2018, un 1,2 por ciento más que en 2017, lo que sitúa a esta región en la segunda con los costes más altos. Solo le supera el País Vasco, con un coste de 36.837,00 euros. En el lado contrario se encuentran de nuevo Extremadura con 25.390,11 euros y Canarias con 26.679,81 euros.
Coste laboral por actividad económica
La Industria tuvo en 2018 el mayor coste total neto por trabajador, con 37.235,53 euros. Dicho coste se incrementó un 0,9% respecto al año anterior, con aumentos del 0,4% en el coste salarial y del 2,1% en el no salarial. La Construcción experimentó el mayor incremento del coste neto respecto al año anterior (un 1,4%). En este sector destacó tanto el crecimiento del coste salarial (1,4%), como el del no salarial (1,2%).
El sector Servicios presentó los menores costes laborales. Respecto al año anterior, su coste neto subió un 1,2%, con aumentos del 1,0% en el coste salarial y del 2,0% en el no salarial.
Las diferencias en el coste laboral por trabajador según las distintas actividades económicas fueron notables en 2018. Así, oscilaron entre los 19.083,02 euros anuales brutos por trabajador en la Hostelería, hasta los 75.835,09 euros en Suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado.
La sección energética y la financiera fueron las que mayores sueldos y salarios pagaron a sus trabajadores y las que asumieron mayor coste en beneficios sociales. Las Industrias extractivas y Suministro de energía eléctrica, gas, vapor, aire acondicionado presentaron los mayores gastos derivados del trabajo (ropa de trabajo, pequeño utillaje, transporte, indemnizaciones por fin de contrato, pagos compensatorios…). Las indemnizaciones por despido supusieron mayores costes laborales en las Actividades financieras y de seguros y en Actividades Inmobiliarias.
En el extremo opuesto destacaron la Administración pública y la Educación, con costes abonados en concepto de despido muy inferiores a la media. La sección energética y las Actividades financieras y de seguros fueron las que más invirtieron en la formación de sus trabajadores. Por el contrario, la Hostelería y las Actividades artísticas, recreativas, entretenimiento registraron el menor gasto en esta partida.
Las mayores subvenciones y deducciones fiscales por creación de empleo y fomento de la formación profesional se dieron en las Actividades artísticas, recreativas, entretenimiento las menores se presentaron en la Hostelería.
Coste laboral por el tamaño de empresa
Las empresas de mayor tamaño pagaron sueldos más elevados por trabajador que las empresas medianas y pequeñas. En consecuencia, las cotizaciones a la Seguridad Social de las primeras también fueron mayores. Las empresas de tamaño mediano recibieron la mayor cantidad de subvenciones y deducciones fiscales. El peso de esta partida respecto al coste total fue similar en las empresas pequeñas y medianas e inferior en las empresas grandes.
Los beneficios sociales y gastos en formación profesional fueron significativamente mayores en los centros de mayor tamaño, mientras que los costes derivados del trabajo fueron superiores en los centros pequeños y medianos. Las empresas de tamaño mediano tuvieron los mayores costes en indemnizaciones por despido.