- Se inicia el procedimiento de desalojo del parque de El Retiro, recogido en el Protocolo.
- Ante las fuertes rachas de viento, de 90 kilómetros por hora, anunciadas por la Agencia Estatal de Meteorología AEMET para esta tarde a partir de las 17.00 horas y en aplicación del Protocolo ante situaciones meteorológicas excepcionales.
- El Área de Medio Ambiente y Movilidad activa el nivel de alerta roja al esperarse rachas de viento superiores a 85 km/h.
El Ayuntamiento de Madrid ha comenzado el procedimiento de desalojo del parque de El Retiro, como medida de prevención ante las fuertes rachas de viento anunciadas por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMT), y en aplicación del ‘Protocolo de gestión de incidencias y actuación ante la previsión de situaciones meteorológicas excepcionalmente adversas’. Igualmente se va a proceder al desalojo de la Quinta de los Molinos, Fuente del Berro, Jardines de Sabatini y Torre Arias.
Según las previsiones de la AEMET, a partir de las 17.00 horas de este jueves se esperan fuertes rachas de viento, con velocidades máximas de 89 kilómetros por hora, superiores a los 85 que marca el protocolo del Retiro para activar la alerta roja. La alerta roja implica el desalojo y posterior cierre del parque para evitar que la posible caída de ramas o árboles puedan poner en riesgo a las personas que paseen por esta zona verde. En los accesos al parque se colocarán carteles informativos.
El parque permanecerá cerrado hasta esta noche a las 24.00 horas, para que técnicos municipales puedan realizar una primera inspección de incidencias que se hayan podido producir y valorar la situación.
La Policía Municipal está al frente del desalojo, en el que también participan agentes de parques y personal del parque. El procedimiento consiste en que se cierran las puertas las Puertas de Mariano de Cavia y en sentido antihorario hasta la Puerta de la Independencia, dejando abiertas las vías de evacuación hasta el cierre definitivo, es decir, las puertas de Niño Jesús, Reina Mercedes, Independencia, Ángel Caído y Felipe IV.
En estas puertas, se sitúan agentes de parques para facilitar la salida de usuarios e impedir la entrada desde el exterior. A su vez, se realizan barridos de las zonas indicando a los usuarios las puertas a las que deben dirigirse e informando del cierre a las distintas instalaciones.