- Según una propuesta de Ahora Madrid aprobada por unanimidad en el Pleno de la Junta Municipal de Chamberi.
- La sesión plenaria, celebrada esta semana, contó con la asistencia de familiares de Matilde Ucelay, primera mujer titulada en Arquitectura, en España.
El Pleno de la Junta Municipal de Distrito de Chamberí acordó esta semana dar visibilidad a mujeres ilustres, denominando con sus nombres espacios públicos de los barrios, como jardines o plazas. El objetivo del acuerdo plenario es rescatar del olvido a mujeres destacadas que no obtuvieron ningún reconocimiento en la época en la que vivieron. Las figuras elegidas han sido la escritora y poeta de la generación del 27, Concha Méndez, y Matilde Ucelay, la primera mujer española titulada en Arquitectura.
El grupo municipal Ahora Madrid elevó al Pleno de la Junta Municipal de Distrito una propuesta para instar al órgano correspondiente del Ayuntamiento a que asigne el nombre de Concha Méndez a los jardines situados en la calle Bretón de los Herreros esquina con la calle Fernández de la Hoz, y el nombre de Matilde Ucelay a los jardines situados en la calle Doménico Scarlatti.
Con el voto favorable de todos los grupos municipales, el Pleno de la Junta Municipal de Chamberí aprobó esta semana la propuesta en una sesión que contó con la asistencia de familiares de Matilde Ucelay.
Concepción Méndez: poetisa de la Generación del 27
Concepción Méndez Cuesta, conocida como Concha Méndez, fue una escritora española contemporánea de la Generación del 27 especialmente conocida por su obra poética. Pese a desarrollar un papel protagonista en el tejido cultural como poetisa y editora, quedó relegada a su condición de pareja de Manuel Altolaguirre, poeta, guionista y cineasta español.
Nacida en Madrid en 1898, Méndez tomó contacto con la poesía en las tertulias de los años 20 y pronto forjó amistad con artistas como Maruja Mallo, Rafael Alberti o Luis Buñuel. Publicó su primer libro, Inquietudes, y ya en sus poemas iniciales se vislumbraba su deseo de libertad y su animadversión a los cánones de vida establecidos para las mujeres en aquella época.
Escribió Canciones de mar y tierra, influida por las lecturas de los versos de Alberti, Federico García Lorca y Luis Cernuda. Compartió las ideas de Ortega y Gasset sobre la deshumanización del arte, en su caso como forma de distanciarse del sentimentalismo asociado a la literatura escrita por mujeres.
Su segunda faceta, la de editora, se desarrolló a partir de 1932. Junto a su marido, compró la imprenta donde nació la revista Héroe. El matrimonio comenzó a editar libros propios y ajenos, una relación plasmada en las portadas de muchas de las grandes obras del 27, donde puede leerse «Concha Méndez & Manuel Altolaguirre Impresores».
Durante la Guerra Civil ambos tomaron partido por la República, razón que les hizo tomar el camino del exilio. Tras el periplo por varios países se instalaron en La Habana (Cuba) donde ella siguió publicando sus poemas y más tarde, la escritora se estableció en Méjico donde murió en 1986. Su obra poética está recogida en Poemas 1926-1986, edición preparada por el marido de su hija Paloma, el profesor James Valender.
Matilde Ucelay: primera mujer arquitecta en España y Premio Nacional de Arquitectura
Matilde Ucelay Maórtua, fue la primera mujer titulada en Arquitectura en España, en 1936, y también la primera en ejercer una carrera profesional plena con más de 120 proyectos realizados íntegramente por ella. Una trayectoria excepcional que fue reconocida con el Premio Nacional de Arquitectura 2004.
Madrileña, nacida en 1912, Ucelay perteneció a esa generación de mujeres de la burguesía ilustrada española que, educadas en ambientes liberales, artísticos y profesionales, empezaron a acceder a las universidades en las primeras décadas del siglo XX.
En 1937 fue nombrada secretaria del Colegio de Arquitectos de Madrid pero tres años más tarde fue depurada por la Dirección General de Arquitectura y condenada en Consejo de Guerra a inhabilitación perpetua para cargos públicos, directivos y de confianza, y, durante cinco años, para el ejercicio privado de la profesión. Como consecuencia de ello nunca recibió encargos públicos y sus primeros proyectos no pudieron llevar su firma. No obstante, a lo largo de los años ejerció plenamente su profesión liberal hasta en Madrid, hasta su jubilación. Murió en 2008.