Para CCOO de Madrid, los términos en que estaba planteada la operación no se correspondían con las necesidades reales de remodelación del entorno de Chamartín, sino que suponían una nueva vuelta de tuerca a la terciarización de la ciudad y proyectaban un parque de oficinas y viviendas muy superior a la demanda real.
El sindicato recuerda que existen más de dos millones de metros cuadrados de oficinas vacías en Madrid, y más de 100.000 viviendas sin habitar. Por otro lado, las necesidades de regeneración urbana y económica de la capital no están limitadas al Norte. Antes al contrario, se acumulan en los barrios periféricos del Sur y el Sureste, tendentes a convertirse en barrios dormitorio.
La nueva propuesta del Gobierno local aborda las necesidades de regeneración de manera más equilibrada, al garantizar en el corto plazo el interés público de las plusvalías y con el nuevo cálculo de edificabilidad.
No obstante, CCOO de Madrid sigue exigiendo un proceso de diálogo en torno al modelo de ciudad a través de la revisión del PGOU, para situar, tras un debate público, las prioridades en materia urbanística. De este modo, las distintas operaciones pendientes podrán valorarse en cuanto a su encaje en el proyecto de ciudad, y no de manera aislada, a la vez que se interviene de forma decidida en las periferias del Sur y Sureste.