La Comunidad de Madrid doblará para este año 2024 la inversión prevista para la mejora de los 2.500 kilómetros de carreteras de titularidad autonómica, con un presupuesto de 88 millones de euros, frente a los 44 que se presupuestaron en 2023. Con esta dotación se podrán llevar a cabo trabajos que van desde la reposición de marcas viales y señalización, colocación de barreras de protección para motoristas y obras de drenaje o poda.
Así lo ha explicado hoy el consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras, Jorge Rodrigo, durante la visita que ha realizado al Centro de Conservación y Explotación de Brunete, uno de los 14 con los que cuenta el Ejecutivo autonómico para velar por la seguridad de las vías madrileñas. Con ese fin se ha puesto en marcha una estrategia específica para el periodo 2023/2026, “que aporta un presupuesto de 78.000 euros por kilómetro e incluye actuaciones especializadas de inspección de asfaltados, puentes y estructuras”, ha recordado.
Este proyecto se ha diseñado a través de siete grandes ejes. El primero ha supuesto la reposición de barreras de motoristas; de señalización vertical y repintado de la horizontal; de mejora del firme, limpieza y obras de drenaje y siegas y podas de vegetación y arbolado, entre otras.
El segundo, orientado al mantenimiento y rehabilitación de firmes ha permitido ejecutar estas acciones en diferentes vías como la M-410 o la M-604, ambas en un tramo de 10 kilómetros.
Asimismo, para la reparación de estructuras se han invertido 3 millones de euros, casi la misma cuantía (2,4) que lo presupuestado para los numerosos trabajos de sustitución de alumbrado exterior en carreteras tan importantes como la M-45, M-406 o M-506. Destaca también la implantación de sistemas de control de velocidad en municipios como Carabaña, Hoyo de Manzanares y Gargantilla del Lozoya y Pinilla de Buitrago, y las medidas de acondicionamiento de márgenes y glorietas e inspección y seguimiento de puentes.
Digitalización para vías más seguras y eficientes
Durante la visita, el consejero ha destacado que, actualmente, la Dirección General de Carreteras está trabajando en la aplicación de nuevas tecnologías, como la inteligencia artificial (IA), “para que nuestras vías sean cada vez más seguras”. En este sentido, la irrupción de la IA en este ámbito posibilitará, evitar siniestros por atropellos de animales, mediante la detección de su presencia y posterior aviso al conductor o que este pueda detectar la existencia de automóviles en el entorno de las intersecciones.
La digitalización también se está aplicando de forma experimental para la utilización de los datos que generan los llamados chivatos o asistentes avanzados que incorporan los vehículos y que permitirán emitir información relacionada con frenazos, aceleraciones o velocidad.
Por último, se está estudiando la realización de pruebas de iluminación inteligente en glorietas que, utilizando la localización electrónica de los automóviles, permitirá que las luces de la zona se apaguen cuando no haya tránsito, lo que contribuirá al ahorro energético.