Si quieres conocer la amplia obra pictórica de Manuel Benedito, esta es tu oportunidad. Hasta el próximo día 30 de junio, en las instalaciones del Centro Cultural Emilia Pardo Bazán, puedes visitar esta exposición gratuita sobre el pintor valenciano, uno de los grandes desconocidos, realizada en colaboración con la fundación que lleva su nombre.
Este mes de junio, en el que conmemoramos el 60ª aniversario del fallecimiento de Manuel Benedito (20 de junio de 1963) es un momento ideal para conocer el importante fondo documental que, en una escogida selección de imágenes realizadas por los fotógrafos más relevantes de cada periodo, se presentan en esta exposición.
Además, voluntariado de su museo realiza visitas guiadas gratuitas a esta muestra en el Centro Cultural Emilia Pardo Bazán los martes y jueves 13, 15, 20 y 22 de junio a las 11:00 h. La inscripción puede realizarse a través del correo electrónico ccemiliapardobazan@madrid.es o bien en las dependencias del centro cultural, con entrada por la calle de Goya 1B.
Nacido en Valencia el 25 de diciembre de 1875, Manuel Benedito recibió su formación en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos. Con el traslado de su familia a Madrid empieza como alumno del maestro Joaquín Sorolla y, entre los años 1900 y 1904, obtiene un pensionado (reducido grupo de nueve pintores, escultores y músicos) en la Academia Española de Bellas Artes en Roma. Durante esta etapa realiza viajes por Italia, Francia, Bélgica y Holanda, donde adquiere conocimientos de los grandes pintores europeos y de las grandes escuelas pictóricas. Tras esta etapa y, con la obra Canto VII, del Infierno de Dante obtiene la primera medalla en la Exposición Nacional de Bellas Artes.
Académico de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (Madrid) y de la de San Carlos (Valencia), a lo largo de su trayectoria también fue miembro de la prestigiosa Hispanic Society de Nueva York, así como de otros museos e instituciones. Durante su dilatada carrera participó en exposiciones por todo el mundo, destacando las realizadas en ciudades como París, Bruselas, Venecia, Londres o Sydney y Filadelfia.
Una muestra dividida en cuatro partes
Amante de la pintura al aire libre durante sus años de juventud, los paisajes y ambientes con amplia luz van dejando paso, poco a poco, a un nuevo estilo más centrado en el retrato de estudio, como los célebres de Cléo de Meróde, Pastora Imperio, la Condesa de Yebes, la señora de Moncada, Eduardo Dato, Jacobo Gómez de la Loma, el general Weyler, José Sánchez Guerra o de su maestro Joaquín Sorolla.
Durante los inviernos pintaba retratos, en verano, paisajes y bodegones. A partir de los años veinte su camino ya está definitivamente trazado y su pintura es expresión de sus convicciones, de su formación y de su sentimiento. La muestra del Centro Cultural Emilia Pardo Bazán está dividida en cuatro partes en las que se reflejan diferentes etapas de la vida y obra del pintor valenciano:
–Los comienzos y la estancia en Roma. Durante su estancia en diferentes países europeos, Benedito perfeccionó las técnicas aprendidas durante su pensionado en Roma. Durante esos años refleja un entusiasmo, ganas de aprender y conciencia de sentirse afortunado ante las posibilidades que le abría la estancia romana.
–Real Academia y la Escuela de Bellas Artes de San Fernando. Durante esta etapa Benedito ya era un gran pintor de éxito. En 1923 fue elegido académico de la Real Academia de San Fernando, en donde en 1924 fue nombrado para ocupar la Cátedra de Colorido y Composición. Su discurso de ingreso sobre El porvenir de la Real Fábrica de Tapices y Alfombras de Madrid le llevó años más tarde a ser director de dicha institución.
-El estudio del pintor. Desde su llegada a Madrid (1895), el pintor valenciano tuvo diferentes estudios en calles como Jacometrezo, Barquillo, Don Ramón de la Cruz o Claudio Coello, hasta instalarse definitivamente en la calle de Juan Bravo 4, donde está localizado su museo y fundación. Un lugar similar al de la casa museo de su maestro Joaquín Sorolla en Madrid, pero que actualmente ocupa un edificio de pisos, si bien se mantienen las instalaciones museísticas.
–Los temas de su pintura. Amante de la pintura al aire libre en sus primeros años, su multitud de obras paisajísticas reflejan la influencia de su maestro Joaquín Sorolla. La luz y el ambiente de cada composición van dejando paso a composiciones de estudio, donde realiza bodegones y, los retratos con los que llegó a ser uno de los pintores especializados en retratos más importantes de la época.
Por otro lado, en esta exposición hay un pequeño homenaje al momento artístico en que Manuel Benedito coincidió con Emilia Pardo Bazán: uno de los números del año 1896 de la Revista Apuntes, donde el pintor puso las ilustraciones al cuento En el santo de la escritora gallega.
Durante sus diferentes etapas pictóricas siempre ha mantenido la tradición de la pintura española con reflejo en tres de nuestros grandes autores: Velázquez, Goya y Sorolla, que se pueden apreciar en las obras realizadas hasta su muerte en Madrid, el 20 de junio de 1963.
