El Ministerio del Interior ha sancionado a los cuatro agentes de la Policía Nacional expedientados por no detectar el acceso al macro-complejo en Canillas, sede central del Cuerpo, en el distrito de San Blas-Canillejas, de un chico de 16 años de edad y de origen extranjero que robó dos armas de fuego y diversa munición.
Dos de los agentes han sido sancionados con mes y medio de suspensión de funciones por una falta grave, mientras que los otros dos serán castigados con 3 y 20 días, respectivamente. Los hechos ocurrieron el pasado domingo, 12 de junio, cuando el chico saltó el muro perimetral, de unos tres metros de altura, supuestamente de los más seguros de la Policía Nacional.
Sin que saltara ninguna alarma, el menor se desplazó a uno de los vestuarios de los agentes, reventó varias taquillas y se llevó, entre otros objetos, dos pistolas y munición. Posteriormente volvió a saltar por encima del mismo muro por el que había entrado.
No fue hasta más tarde cuando los agentes se percataron del robo y se inició una investigación, que derivó en la detención varias horas después del chico en plena calle, donde iba exhibiendo una de las pistolas, mientras que la segunda arma se encontró en su domicilio. Al parecer, las cámaras de Canillas captaron el asalto y se activaron las alarmas visuales, que fueron ignoradas, según el expediente de sanción, que señala también que uno de los policías se incorporó tarde a su turno.
Desde el sindicato JUPOL reclaman el incremento de policías encargados de la vigilancia y seguridad en este tipo de instalaciones. Denuncian que centros de alta seguridad como el complejo de Canillas son objetivo de organizaciones criminales y terroristas debido a la información que se custodia en ellos.