“Este pregón para mi es especialmente emocionante porque amo Madrid, lo amo tanto que nací un dos de mayo, día especial para la ciudad”. Con estas emotivas palabras el mago madrileño y universal Jorge Blass iniciaba anoche de forma oficial las celebraciones en honor a San Cayetano, San Lorenzo y la Virgen de la Paloma (programación completa aquí). Blass ha estado acompañado por la tercera teniente de alcalde, Silvia Saavedra, y el concejal de Centro, José Fernández.
Este año las fiestas retoman la normalidad tras la pandemia y se celebran sin control de aforo durante los próximos diez días en las calles del barrio de Embajadores, uno de los seis que componen Centro. Este distrito ha jugado un papel fundamental en la vida de uno de los mejores ilusionistas del mundo. “Con apenas 12 años aprendí el arte de la magia en estos barrios”, aseguró Blass en referencia no solo a Embajadores, sino también al barrio de Universidad y, especialmente, al Circo Price donde aquel niño es ahora director del Festival Internacional de Magia de Madrid.
Son calles en las que degustar como en pocos sitios la gastronomía típica madrileña de la que no se olvidó el mago: “Una de mis comidas favoritas es el bocata de calamares, las bravas y los callos que tomamos cuando venimos al Rastro”. Tampoco lo hizo de lo que aseguró es una de las cosas que más le gustan de estas fiestas: “Los chulapos y las chulapas bailando agarraos”.
Esta ciudad “tiene un algo y es que te brinda todo tipo de oportunidades”, señaló Blass recordando que “los espacios, las salas y teatros de Madrid me sirvieron para desarrollar mi magia y acabar dedicándome a mi pasión”. Una pasión que le ha llevado por todo el mundo y que le ha servido para corroborar que “Madrid y sus barrios tienen algo extraordinario: la vida cultural y artística que permite que músicos, actores, bailarines, ilusionistas, cómicos y todo tipo de artistas forjen sus sueños”.
Durante este momento de magia protagonizado por el ilusionista, el concejal del distrito de Centro, José Fernández, señaló que con la presencia de Jorge Blass, “contamos con un pregonero de excepción que, ante todo, es una excepcional persona, con una personalidad arrolladora y una sonrisa perenne y, lo más importante, un gran ilusionista y madrileño”.
Tras la cita de anoche y hasta el día grande de las fiestas, la festividad de la Paloma el próximo día 15, el distrito de Centro encadena diez días en los que se conmemora a dos santos de gran arraigo entre los madrileños y a la Virgen de la Paloma, considerada como la ‘patrona popular’ de la ciudad. Las actuaciones se llevarán a cabo en tres escenarios principales: la plaza del General Vara de Rey, en San Cayetano; la de Arturo Barea, en San Lorenzo, y los jardines de las Vistillas, en la Paloma. También habrá otras calles y zonas del barrio donde entidades y asociaciones vecinales desplegarán numerosas propuestas para disfrute de la ciudadanía.
Con el amplio programa de este año, “queremos transmitir la ilusión de volver a disfrutar de nuestras actividades, nuestros conciertos, nuestros tradicionales concursos y que las calles de nuestro distrito se engalanen de nuevo para rendirse al paso de las chulapas y los chulapos, que abanderen un año más la historia de nuestra ciudad”, subrayó Fernández.
Elección de personajes castizos
Previa al pregón, fue la elección de los personajes castizos, otra de las tradiciones de estas fiestas. Sin la Casta, la Susana, la Maja de Lavapiés, Don Hilarión, el Julián y la Señá Rita, “personajes tan madrileños, no podríamos entender estas fiestas porque, junto con las actividades y los actos litúrgicos, ellos son protagonistas destacados”, aseguró el concejal de Centro.