Las residencias públicas de mayores madrileñas Francisco de Vitoria y Nuestra Señora del Carmen de Cantoblanco han suspendido las visitas de familiares tras registrarse a lo largo de los últimos días nuevos casos de contagios por coronavirus COVID-19 entre sus residentes, después de reabrirse el pasado 8 de junio cuando Madrid accedió a la Fase 2.
Las residencia pública de mayores Francisco de Vitoria cerró esta semana las visitas de familiares a los residentes después de que uno de los internos diera positivo al realizársele la prueba PCR. Siguiendo el protocolo establecido para esta situación, el mayor fue aislado y las visitas familiares fueron suspendidas.
Esta residencia de Alcalá de Henares fue una de las más afectadas por la pandemia, con hasta 60 fallecidos de los 526 residentes, siendo además una de las primeras intervenidas por la Unidad Militar de Emergencias (UME).
En cuanto a la residencia de mayores Nuestra Señora del Carmen de Cantoblanco, en la capital, varios mayores han dado positivo por coronavirus esta semana, lo que ha hecho activarse el protocolo y prohibir las visitas de familiares. En esta residencia, con más de 300 plazas para mayores, han fallecido alrededor de 160 internos desde el inicio de la pandemia.
Residencia privada Santísima Virgen y San Celedonio
Por su lado, la residencia privada de mayores Santísima Virgen y San Celedonio, en el distrito madrileño de Chamartín junto al estadio Santiago Bernabéu, tuvo que suspender la semana pasada las visitas de familiares ante el incumplimiento de algunos de los requisitos del protocolo de la Comunidad de Madrid para la Fase 2 en residencias.
Uno de esos requisitos incumplidos es el de la existencia de una zona debidamente preparada para el encuentro entre residentes y familiares, donde se respeten las distancias mínimas de seguridad sanitaria. Desde el propio centro aseguran que reabrirán las visitas en breve y que llevan sin casos de coronavirus más de un mes.
Esta residencia privada también fue una de las más afectadas por la pandemia, con unos 24 fallecidos de 164 residentes, razón por la cual fue uno de los 14 geriátricos en ser intervenidos por el Gobierno de la Comunidad de Madrid a principios del mes de abril.