La Sala Roja de los Teatros del Canal presenta, entre el 3 y el 7 de mayo, el montaje de danza Cascanueces, con el Ballet Nacional de Cuba y la coreografía de Alicia Alonso y música de Chaikovski interpretada en directo por la Orquesta Sinfónica Verum. Alicia Alonso fue intérprete de Cascanueces en el American Ballet Theater y los Ballets Rusos de Montecarlo, donde fue llevado por grandes maestros de la antigua escuela rusa, como Nikolai Sergueiev y Alexandra Fedórova.
La Sala Negra continúa hasta el 7 de mayo con el montaje El pack. Esta comedia refleja cómo estamos hiperconectados pero más solos que nunca.La propuesta escenográfica es limpia, con mínimos elementos que conforman un espacio autosuficiente, aséptico y solitario. La música original está compuesta por Carmen París y se adecua al milímetro a la propuesta dramática, unas veces íntima y acústica, otras electrónica.
Desde el 19 de abril hasta el 5 de mayo, la Sala Verde de los Teatros del Canal presenta La vida es sueño [vv.105-106], adaptación fiel a la esencia de la obra de Calderón de la Barca.¿Quién es dueño de sus sueños? ¿Es deseo o es razón lo que nos guía y orienta? ¿Qué nos distingue de la bestia que encarna nuestras pasiones? ¿Es la razón una represión que nos permite vivir en sociedad? ¿Puede un ser aislado desde su nacimiento, abandonado a su propio raciocinio, no engendrar el monstruo: esa hipertrofia de la razón desconectada de la experiencia sensorial que nos humaniza?
También en la Sala Roja, del 10 al 14 de mayo se podrá disfrutar con el espectáculo de danza Giselle, interpretado por el Ballet Nacional de Cuba. Dentro del repertorio del Ballet Nacional de Cuba, Giselle posee una significativa importancia, no solo en lo que concierne a su propia historia, sino también porque con esta obra y con Alicia Alonso, su excepcional intérprete, Cuba trasciende por primera vez en el ámbito internacional de la danza.
La Sala Negra de los Teatros del Canal ofrece a partir del 10 de mayo, el montaje de teatro Los esclavos de mis esclavos. Ficción contemporánea sobre cooperantes secuestrados y mujeres en Afganistán. La obra habla de las pasiones que impulsan a la gente a arriesgar su vida en países lejanos, las que impulsan la guerra, el fanatismo, la paz. Documentado a partir de testimonios de rehenes liberados por los integristas, ofrece una visión real de una situación que supera a la ficción.
