Agentes de la Policía Municipal de Madrid han remitido a la autoridad judicial un caso de posible quebrantamiento de condena después de encontrar un dispositivo de localización permanente manipulado en el bolsillo de un individuo que cuenta con dos órdenes de alejamiento en vigor.
El hallazgo se produjo durante la mañana del pasado fin de semana en un establecimiento de ocio situado en la calle Amor Hermoso del distrito de Usera. La intervención policial, en la que participaron efectivos de la Inspección de Trabajo, se enmarcaba en un operativo activado por las quejas vecinales sobre reyertas y altercados en la zona.
Durante la inspección de seguridad, los agentes se percataron de que un hombre intentaba abandonar el local de forma discreta para evitar ser identificado. Los policías interceptaron al individuo, un varón de 36 años y nacionalidad peruana, y procedieron a un cacheo preventivo.
Fue durante esta identificación cuando se descubrió en su bolsillo una pulsera de seguimiento telemático cortada a la altura de la correa. Al ser cuestionado sobre el estado del dispositivo, el hombre alegó que «se le había roto en el trabajo». Los efectivos policiales verificaron que el individuo tenía dos órdenes de alejamiento activas, ambas dictadas en protección de dos mujeres residentes en el municipio de Getafe.
A pesar de la gravedad del hallazgo, que constituye un riesgo potencial para la seguridad de las víctimas, el hombre no fue detenido en el acto. Según fuentes de la Policía, en ese momento no se pudo acreditar ni la intencionalidad en la manipulación del dispositivo ni que hubiera incumplido las medidas judiciales, al no poder determinar el lugar exacto donde se encontraba la última vez que el sistema registró el dispositivo operativo.
La Policía Municipal ha remitido todas las diligencias y pruebas, incluyendo la pulsera manipulada, a la autoridad judicial competente, para que sea el juez quien determine las medidas cautelares adecuadas y evalúe la posible comisión de un delito.

