El precio de la vivienda se ha convertido en un factor clave para los estudiantes a la hora de elegir cómo estudiar una determinada carrera. El salto a la universidad era tradicionalmente un buen momento para emanciparse, pero los precios del alquiler han modificado esta tendencia. Ahora se decide entre estudiar desde casa o cambiar de universidad pese a tener preferencias.
“Los jóvenes no cambian la carrera que quieren estudiar, pero sí que modifican cómo lo van a hacer por la falta de vivienda. Hay poca oferta para lo que debería y, la que hay, no cumple con el precio esperado por los jóvenes”, india Alberto Añaño desde LIVE4LIFE, especializada en el alquiler para estudiantes.
Según un reciente análisis de la compañía, ya hay un 58% de jóvenes que descartan determinadas ciudades en las que iban a estudiar por el precio del alquiler o el coste de vida. Un 64%, además, considera el alquiler como el principal obstáculo a la hora de elegir la ciudad en la que estudiar. Y, por si fuera poco, el 45% elige su destino en base a que tenga condiciones asequibles.
“El precio del alquiler ya forma parte del debate interno de cada joven a la hora de elegir dónde estudiar”, sentencia Añaños, cuya compañía busca facilitar el proceso de búsqueda mediante la gestión de más de 40.000 alojamientos en toda España.
De hecho, como explican desde la compañía, también hay jóvenes que deciden estudiar desde casa por culpa de los precios. “Si no puedes alquilar un piso y una habitación se te va también de presupuesto, ahora hay suficientes ofertas educativas 100% online. Y ya hay muchos jóvenes que optan por esta opción”.
Como detallan desde LIVE4LIFE, el dilema de los jóvenes en España es ese. Si marcharse fuera de casa para estudiar como se ha hecho tradicionalmente o si, por las dificultades económicas que eso supone, optar por quedarse en la casa familiar y estudiar a distancia. Desde la plataforma subrayan la necesidad de aumentar el parque de viviendas, critican las medidas en política de vivienda que se han implantado y animan a los propietarios a unirse al mercado estudiantil porque “son los mejores inquilinos posibles”.
Según datos internos de LIVE4LIFE, el 90% de los inquilinos que alquilan habitaciones son jóvenes de 18 a 25 años. También destaca el 6% de 26 a 35 años, En edades más avanzadas es menos habitual, aunque la crisis de la vivienda está abriendo también mercado en dichos tramos. Añaños asegura que este tipo de alquileres puede aumentar un 20% la rentabilidad del propietario.
Según los datos de la compañía, el precio medio de una habitación en España es de 420 euros en 2025. En ciudades como Madrid aumenta hasta los 550, mientras que en Alicante ha subido hasta los 340 euros, en Granada también hasta los 290, y misma tendencia alcista en Valencia (400 euros al mes) y Sevilla (350 euros al mes).

