La Real e Ilustre congregación de Nuestra Señora de la Soledad y Desamparo, en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid, organizan la ya tradicional tamborrada este 20 de abril, Domingo de Resurrección. Correrá a cargo de la Banda de Tambores de la Cofradía de la Coronación de Espinas (Zaragoza).
Como todos los años desde hace ya unos cuantos, la clásica tamborrada -o tamborada- marca el preludio del punto y final del itinerario por las iglesias y estaciones de la Pasión. La música sale del sitio de culto para abrirse a toda la ciudad con un pasacalles de medio centenar de repicantes y tamboreros que hace retumbar los muros de la villa y sus interiores.
Pero ya sea maña o manchega, vasca o turolense -de Teruel, por cierto, viene el rito-, la catarsis que es el redoble de barriles, tambores, bombos y timbales (portados en esta ocasión por la Banda de Tambores de la Cofradía de la Coronación de Espinas, de Zaragoza) es la misma: el júbilo descargado sobre la piel que produce ese efecto de pertenencia y mancomunidad sellado por la contundencia de los músicos procesionarios.
El paso recorre un itinerario en el que numerosos cofrades acompañados de tambores y bombos ponen banda sonora a la conmemoración de la Resurrección de Jesucristo tres días después de su muerte: a las 11:30 horas se celebrará la Eucaristía en el Monasterio Jerónimo del Corpus Christi (Convento de las Carboneras), de donde saldrán hacia la Plaza del Conde de Miranda, Calle del Puñonrostro, Calle de San Justo, Calle del Cordón, Plaza de la Villa, Calle Mayor, Calle de Ciudad Rodrigo y la Plaza Mayor, donde la tronada rompe el último silencio entre las 13:00 horas y las 14:00 horas.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, junto a la de Zaragoza, Natalia Chueca; la delegada de Cultura, Turismo y Deporte madrileña, Marta Rivera de la Cruz, y el concejal-presidente del distrito de Centro, Carlos Segura, presenciará la tamborrada a cargo de la Cofradía de la Coronación de Espinas de Zaragoza.