Los sindicatos MATS (Movimiento Asambleario de trabajadores de la Sanidad) y CGT han convocado para este jueves, 23 de febrero, paros parciales que se realizarán de 12:00 a 14:00 horas en el turno de mañana y de 18:00 a 20:00 horas en el turno de tarde, a los que están convocadas todas las categorías profesionales de Atención Primaria.
Los convocantes, junto a la Asociación de Facultativos Especialistas (AFEM) y la Asociación Madrileña de Enfermería (AME), y con el apoyo de CSIF, SUMMAT (Asamblea de Trabajadores del SUMMA 112), la Plataforma SAR y la Plataforma de Centros de Salud, llaman de forma paralela a secundar concentraciones a las puertas de los 423 centros de salud de la Comunidad de Madrid, tanto a las 13:00 horas como a las 18:30 horas.
Denuncian que la inversión en Atención Primaria debería incrementar su presupuesto hasta llegar al 25%, tal y como señala la Organización Mundial de la Salud (OMS). En la actualidad, con apenas el 10,7%, Madrid es la última comunidad autónoma en el ranking de inversión sanitaria.
Otra de las reivindicaciones que se ha puesto sobre la mesa es la bajada de ratios: para evitar la saturación en Atención Primaria, los cupos máximos para médicos y enfermeros deberían ser de 1.300 pacientes, y para los pediatras, no más de 1.000 niños asignados.
Además, «creemos que la Comunidad de Madrid tendría que comprometerse por escrito a mantener la Atención Primaria en el turno de tarde: el desmantelamiento de este turno sería un golpe definitivo en nuestro primer nivel de asistencia sanitaria».
Los ciudadanos, insisten, «están cansados de que se les den largas en sus centros de salud: hay que disminuir los tiempos de espera para acudir al pediatra, odontólogo, médico, etc. En la actualidad, la media es de 9 días, habiendo aumentado en 3 desde 2019; no se puede primar la atención telefónica sobre la presencial; hay que apoyar planes de prevención…».
«Los trabajadores están hartos»
«No solo los ciudadanos salen malparados de esta situación», exponen los convocantes. «Los trabajadores de nuestra sanidad también están sufriendo las consecuencias». Las organizaciones convocantes así como las entidades que apoyan esta convocatoria de huelga, exigen «una reclasificación profesional que reconozca el nivel de cada titulación de acuerdo a la realización de funciones; también solicitamos que desde enfermería se vuelva a poder realizar las prescripciones; pedimos que se implante el Complemento de Productividad Fija por Atención Domiciliaria de Enfermería, que se aprobó por acuerdo en febrero de 2022 y aún no ha sido establecido; hay que recuperar el complemento de dispersión geográfica y ruralidad; tienen que realizarse convocatorias de Oferta Pública de Empleo y Concurso de Traslados de manera anual, sin que las resoluciones puedan tardar más de seis meses…».
«Como vemos, trabajadores y ciudadanos están pagando el pato de las políticas erráticas de la Comunidad de Madrid en materia de sanidad. Nadie se merece esto. Por eso creemos que el apoyo a los paros del 2 de febrero es necesario para que nuestros dirigentes sean conscientes de que esto no puede seguir así y empiecen a pensar en cambiar su guion», concluyen.