CCOO Madrid y UGT Madrid conmemoran este viernes el 1 de mayo, Día Internacional del Trabajo, un atípico día en el que, «además de reivindicar el fortalecimiento de los servicios públicos y el cambio de modelo socioeconómico, también hay un emotivo recuerdo para todas las personas fallecidas a causa del coronavirus».
En este 130º aniversario del 1º de mayo los sindicatos volverán a reivindicar, en esta ocasión de manera virtual a causa del confinamiento, «la necesidad de fortalecer unos servicios públicos que se han demostrado esenciales ante la crisis provocada por el COVID-19».
CCOO y UGT de Madrid recuerdan que «hace falta otro modelo social y económico para encarar los efectos de la pandemia en la economía del país y, fundamentalmente, en la Comunidad de Madrid». En esta jornada internacional de reivindicación y solidaridad, además, también habrá un recuerdo especial para las personas fallecidas y contagiadas a consecuencia del coronavirus en todo el mundo.
Con ocasión del Día Internacional del Trabajo, ambas organizaciones sindicales han lanzado un manifiesto en el que reclaman expresamente «un cambio en el modelo productivo para hacer frente a las secuelas de la pandemia» en una región en la que “miles de personas han fallecido, nuestro tejido productivo ha quedado gravemente tocado, centenares de miles depuestos de trabajo están en peligro y cientos de miles de personas se encuentran sin recursos frente a la crisis”.
Para el secretario general de CCOO Madrid, Jaime Cedrún, este es un día de “recuerdo, de memoria y de reivindicación”. Después de recordar a las personas fallecidas y a las que aún permanecen contagiadas, Cedrún ha llamado la atención sobre todos aquellos que han sufrido accidentes laborales graves y mortales como consecuencia de “unas relaciones laborales de explotación, de precariedad, miserables” como las que “impone el capitalismo salvaje en todo el mundo” y que «se ceba en aquellos países con menor desarrollo y capacidad reivindicativa».
A juicio de Cedrún, este día debe ser para “reconocer el trabajo” y “levantar la voz” para decir que “es la clase trabajadora la que está haciendo frente al COVID-19”, como «han demostrado los trabajadores y trabajadoras del sector sociosanitario, de las cadenas de alimentación, del campo, de la seguridad, de la limpieza, entre otros».
Asimismo, el secretario general de CCOO Madrid también se ha referido a las personas más golpeadas por la crisis, aquellas que “no tienen ningún ingreso, que viven hacinadas en pisos pequeños, que son las que especialmente lo están pasando peor en estos momentos”.
Al respecto, ha insistido en el objetivo de los sindicatos para que esta crisis “nadie se quede atrás” como en la de 2008. Y, para ello, tiene que haber “una renta mínima” y un plan de rescate y de reconstrucción que garantice la posibilidad de salir adelante “sin dejar a nadie en la estacada”. En este sentido, los servicios públicos y el cambio de modelo productivo serán “claves” para lograr “un futuro con empleo estable y condiciones de vida dignas”.
Por su parte, el secretario general de UGT Madrid, Luis Miguel López Reíllo, también ha trasladado sus condolencias a los miles de personas fallecidos por el coronavirus, con un recuerdo especial para las personas mayores cuya muerte ha calificado como de “masacre” y “negligencia criminal” que ya está investigando la Fiscalía.
“Personas que levantaron este país –ha dicho-, que nos proporcionaron el estado del bienestar y que no hemos custodiado como era nuestra obligación” porque las residencias “son negocios comandados por multinacionales y fondos buitre que solo buscan beneficios”, criticó.
López Reíllo ha rendido un homenaje al personal sanitario y al de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Ejército, bomberos, protección civil, SAMUR, limpieza, supermercados, funerarias, etc., con una mención especial para los servicios públicos porque “son los que garantizan el estado del bienestar”.
Y, ante las consecuencias de la crisis provocada por el coronavirus COVID-19, el secretario general de UGT Madrid ha enfatizado en la necesidad de proteger a las personas “más vulnerables” de la región con una renta mínima vital “que debe llegar ya”.
“Necesitamos –continuó- que se permita a los ayuntamientos invertir el superávit para ayudar a sus vecinos, trabajadores, autónomos y PYME” y, también, realizar una desescalada “con las medidas de protección para todos los trabajadores y trabajadoras” proporcionadas por las empresas.
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Muy bien por los sindicatos, reforcemos los servicios públicos para aumentar los parásitos de liberados que dejan en la estacada a sus compañeros.
El juicio de Cedrún no debe alzar la voz, porque el no reconoce el trabajo ni teniéndolo delante.
Los que no tienen ningún ingreso y viven hacinados puede ser porque sus compañeros se gastaron el dinero destinados a ellos, en putas y cocaína.
El señor Luis Miguel López Reíllo, no debe olvidar que la «masacre» y «negligencia criminal» a sido causada por el gobierno muy vinculado a su bandera.
Estoy de acuerdo en proteger a los «más vulnerables» con una renta mínima con las subvenciones anuales que tienen los sindicatos.
Las medidas de protección proporcionadas por las empresas a sus trabajadores serían muy eficientes si el gobierno no las requisara.
No le falten recuerdos señor Luis Miguel López Reíllo y reclamé para los vulnerables el 1,4 millones de euros a sus compañeros de UGT Asturias y su fundación IFES.
NO MÁS SUBVENCIONES A ORGANIZACIONES SINDICALES.