A lo largo de esta semana, buena parte de esos viajeros podrán regresar a España a través de los cuatro vuelos que llegarán desde Iberoamérica (dos de Argentina, uno de Venezuela y otro de Perú) cuya cifra podría estar próxima al millar. A ellos se sumarán los 224 pasajeros (185 españoles -incluyendo a varios alumnos erasmus- y residentes europeos en España) que volverán a España gracias a las gestiones de los Consulados de Roma, Nápoles y Milán y la Embajada de España en Italia, en varios vuelos entre hoy y mañana desde Italia.
También se prevé el retorno de un nutrido grupo de menores no acompañados desde Irlanda cuyos padres se han puesto en contacto con la Embajada de España para favorecer ese retorno en los próximos días y para los que se está buscando una solución después de que hayan decidido ahora abandonar el país.
Pero al margen de estas operaciones de mayor volumen, las Embajadas y Consulados de España se coordinan con las de otros países para facilitar la vuelta de los españoles que estaban en el exterior. Ese es el caso de la Embajada de España en Bolivia que, en coordinación con la de Francia, ha facilitado que un total de 38 españoles pudiesen viajar desde Santa Cruz de la Sierra a París y de ahí a Madrid en un vuelo francés.
La coordinación de la Embajada de España en Ecuador con la de Reino Unido ha permitido, asimismo, que 18 españoles pudiesen embarcar en un vuelo La Paz-Quito-Guayaquil-Londres organizado por los británicos en Quito. Francia, que hará un vuelo con salida el día 8 desde Quito pasando por Guayaquil y París para llegar a Madrid, también embarcará a 41 españoles.
Operaciones similares con otros países también han sido coordinados por las Embajadas de España en Arabia Saudí (14 españoles viajan en un vuelo organizado por Francia), en Líbano (cuatro españoles que utilizaron un vuelo de repatriación de libaneses de España), en Guinea Ecuatorial (40 españoles en vuelo de Air France), en Indonesia (51 españoles en un vuelo de Portugal), en India (que ha coordinado con Francia la repatriación de 47 españoles desde Nepal), en Tailandia (16 españoles en un vuelo de Alemania y 11 en otro de Francia, a los que hay que sumar dos españoles en Camboya que salieron en un vuelo de Francia) y en Vietnam (seis españoles desde Laos en un vuelo suizo).
Respecto a ese último país, la Embajada de España en Vietnam, tras haber ayudado a salir a todas las personas que solicitaron ayuda, se ha encontrado con que un grupo de 17 personas que habían expresado su intención de quedarse en el país, ahora quieren salir, para los que se están buscando alternativas mucho más difíciles ahora que cuando se ofreció la posibilidad junto al resto de los españoles. También la Embajada de España en Filipinas busca alternativas para los 243 españoles que permanecen repartidos en diferentes islas y que, en muchos casos, han rehusado sumarse a otros vuelos por distintas razones.
Por su parte, la Embajada de España en Australia se mantiene en permanente contacto con los 145 turistas españoles que tiene registrados de los que más de cien ya tienen su billete de regreso mientras que el resto baraja quedarse. En Nueva Zelanda, donde la Embajada de España trabaja con una lista de 270 turistas, se espera que la cifra baje drásticamente tras flexibilizarse las restricciones al tráfico aéreo y doblar su oferta de vuelos la aerolínea Qatar. Como también se busca una salida, junto con los otros países de la Unión Europea, para la veintena de españoles repartidos por diferentes islas del Pacífico.
El Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación mantiene abiertos, las 24 horas del día, todos sus canales de comunicación e información al igual que los de las Embajadas y Consulados para atender cualquier consulta de los viajeros españoles en el exterior. Para ellos, también ha puesto en marcha la plataforma «Aloja», que facilita el intercambio del contacto entre los solicitantes y los ofertantes de alojamiento.
