La delegada del Área de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, ha visitado esta mañana el entorno de la plaza de la Cebada, donde esta semana han concluido las obras de remodelación del Eje Centro, desde la calle Magdalena hasta la carrera de San Francisco. Tras estas actuaciones, que han supuesto una inversión de 2,7 millones de euros, se ha incrementado el espacio peatonal en más de 2.500 m2.

Según García Romero es una “transformación profunda” de esta zona con trabajos de rehabilitación sostenible y cambios de mobiliario, sin olvidar la accesibilidad. “De lo que se trata es de mejorar la ciudad, hacerla más sostenible, más habitable, que es lo que queremos desde el Ayuntamiento de Madrid y es el encargo que tenemos de nuestro alcalde, José Luis Martínez-Almeida.”

Mediante los trabajos realizados, se ha renovado la pavimentación de aceras y calzadas, con la homogeneización de los materiales y los acabados con el entorno. De esta forma, se ha configurado un espacio continuo, dando unidad y estabilidad formal al paisaje urbano. Se ha apostado por materiales duraderos y de fácil conservación para minimizar así los costes de mantenimiento.

Las obras han incluido la reordenación de las bandas de aparcamiento y de las zonas de carga y descarga, así como una mejora de la movilidad rodada en el encuentro del Eje con la calle Toledo.

En este sentido, se ha creado una nueva plaza en la intersección de la calle Duque de Alba con la calle Toledo. Además, se han ampliado considerablemente las plazas de la Cebada y de los Carros.

Asimismo, se han configurado espacios estanciales y seguros en los accesos del colegio Nuestra Señora de la Paloma con bancos y vallas para mejorar la comodidad y accesibilidad de padres y alumnos.

Nuevo mobiliario urbano y accesibilidad universal garantizada

Los vecinos y viandantes también podrán disfrutar de un nuevo mobiliario urbano a lo largo de todo el Eje Centro, en el que se han instalado más de medio centenar de bancos, además de nuevos aparcabicis y más papeleras. Asimismo, se ha ordenado la ubicación de los contenedores de reciclaje y de los distintos quioscos de estas calles.

La remodelación de estos espacios garantiza la accesibilidad universal, ya que se ha llevado a cabo una mejor ubicación del mobiliario urbano para evitar que suponga un obstáculo.

En este sentido, también se han instalado pavimentos tacto-visuales y direccionales en pasos de peatones y paradas de autobús y se han ampliado las aceras en aquellos lugares en los que no se cumplía la normativa vigente, garantizando así los anchos mínimos requeridos.

En cuanto al alumbrado público, se ha optado por las soluciones más eficientes, sustituyendo las lámparas de vapor de sodio por puntos de luz LED, que son más sostenibles. Una sostenibilidad que también se ha buscado con la plantación de 45 nuevos árboles.