Desde mamíferos, reptiles, arácnidos y aves, hasta especies protegidas, e incluso caracoles gigantes, son los distintos tipos de animales que la UMA ha recogido por diversos motivos durante el año 2018.
Dentro de los múltiples cometidos que tienen los agentes de la Unidad de Medio Ambiente (UMA) de la Policía Municipal de Madrid está el de la recuperación de todo tipo de animales.
Por desgracia uno de los motivos principales por los que se recogen animales es el del abandono de los mismos, un hecho que está recogido como delito en el Código Penal, al margen de las sanciones administrativas que pueda acarrear.
Además, cuando se trata del abandono de animales exóticos o silvestres, que no están incluidos en la fauna de nuestra zona, se puede ocasionar un grave problema medioambiental, ya que muchos de esas especies se vuelven “invasoras”, alterando la fauna original.
Otros motivos por los que tiene que actuar esta Unidad, en cuanto a la recogida de animales, son el de animales silvestres heridos que aparecen en espacios verdes de nuestra ciudad o incluso en la vía pública, así como el de animales domésticos o domesticados que se escapan de los espacios donde conviven con sus dueños.
De todos ellos, los más numerosos de los que se recuperaron el año pasado son las aves, con un total de 760, entre los que se podían encontrar 306 vencejos (apus apus especie amenazada por la UICN1), 61 aves exóticas, 32 cernícalos, 20 aves rapaces nocturnas y un buitre leonado. El resto de animales corresponden a 81 mamíferos, 71 reptiles (11 serpientes, galpagos, culebras, camaleones, etc…), 3 arácnidos, y 10 caracoles gigantes (achatina fulica). En total 920 animales de distintas especies fueron los que la UMA recuperó por diversos motivos y en diferentes circunstancias.
Además, en la Unidad se registró el control de 609 perros potencialmente peligrosos y se realizaron 84 atestados policiales por diversos motivos que se pusieron a disposición judicial