- La plaza se sitúa delante del Teatro Valle-Inclán, una de las sedes del Centro Dramático Nacional, entre las calles de Argumosa y Valencia.
- La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y el ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, han descubierto hoy la placa con el nombre de esta plaza, en un acto de homenaje a la dramaturga, escritora y actriz fallecida en Madrid el 5 de octubre de 2015.
- La propuesta fue aprobada por la Junta de Gobierno a petición del distrito de Centro y previa solicitud del Centro Dramático Nacional y la Fundación SGAE.
La dramaturga, actriz y escritora Ana Diosdado (Buenos Aires 1938 – Madrid 2015) da nombre desde hoy, lunes 28 de mayo, a una plaza situada en el barrio de Lavapiés, en el espacio situado entre las calles de Argumosa y Valencia, frente al Teatro Valle-Inclán, una de las sedes del Centro Dramático Nacional.
Este mediodía, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena; el ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo; el director del Centro Dramático Nacional (CDN), Ernesto Caballero, y el presidente de la Sociedad General de Autores y Editores, José Miguel Fernández Sastrón, han descubierto la placa con el nombre de la plaza.
Ana Diosdado será recordada en Madrid con este espacio que recibe su nombre. La propuesta fue aprobada por la Junta de Gobierno a petición de la Junta Municipal de Distrito de Centro que preside el concejal Jorge García Castaño y que respondió a su vez a la solicitud presentada por el Centro Dramático Nacional y la Fundación SGAE para honrar la memoria de Diosdado, que falleció en Madrid el 5 de octubre de 2015.
La elección de este espacio ubicado en el corazón del barrio de Lavapiés no es casual. En esta plazuela se levanta el Teatro Valle-Inclán, una de las sedes del Centro Dramático Nacional. Dedicado especialmente a la programación de autores españoles contemporáneos, se trata del rincón perfecto para recordar a la autora.
La última obra que escribió y dirigió Ana Diosdado, El cielo que me tienes prometido, inauguró la temporada 2016/2017 en el Centro Dramático Nacional en un sentido homenaje a su figura. A este montaje, se sumaron distintas actividades que el CDN y la Fundación SGAE organizaron conjuntamente: un ciclo en la sala Berlanga, en el que se pudieron ver algunos de sus trabajos cinematográficos y televisivos, y un encuentro abierto al público en torno a su carrera teatral de la mano del autor y profesor Pedro Víllora y el productor Salvador Collado.
Por último, en el Teatro María Guerrero se celebró Un Lunes con voz, debate en el que participaron, entre otros, Luis Merlo, Paloma Pedrero, María José Goyanes, Luis María Ansón y Antón García Abril, moderado por Guillermo Heras. Además, la sede de la SGAE en Madrid bautizó su jardín con el nombre de la autora. Asimismo, se solicitó al Ayuntamiento de Madrid que nombrara como plazuela de Ana Diosdado al espacio ubicado delante del Teatro Valle-Inclán.
Vocación literaria
La dramaturga Ana Isabel Álvarez-Diosdado Gisbert nació en Buenos Aires en 1938. Tenía la doble nacionalidad argentina-española. Hija de actores y ahijada de la actriz Margarita Xirgu, debutó en el mundo de la interpretación con tan solo cinco años, pero su vocación literaria era más fuerte. Tras publicar En cualquier lugar, no importa cuándo en 1965, con la que fue finalista al Premio Planeta en 1970, se reveló como autora dramática con su primera obra Olvida los tambores, con la que ganó el Premio Mayte y el Foro Teatral.
En 1972 estrenó El Okapi y en 1973 logró el Premio Fastenrath de la Real Academia Española (RAE) con Usted también podrá disfrutar de ella, por la innovación en el lenguaje de los personajes. En 1974 estrenó su drama histórico Si hubiese buen señor con el título de Los Comuneros en el Teatro María Guerrero de Madrid y, dos años después, abordó su primera experiencia en la dirección de escena con Y de Cachemira chales en el Teatro Valle-Inclán de Madrid.
En 1986 escribió la novela Los ochenta son nuestros y en 1988 estrenaría su versión teatral. El texto, un retrato de la sociedad española en la época de la Transición, tuvo una gran repercusión. En España la dirigió Jesús Puente mientras que en Argentina –Los noventa son nuestros-, sería Carlos Gandolfo. El pasado 2010 el director Antonio del Real la volvió a llevar a escena en diferentes ciudades de nuestro país, cosechando de nuevo un éxito de público.
Ana Diosdado es autora también de Cristal de bohemia (1994), Decíamos ayer (1997) y El chico del violín -estrenada con el título comercial de La última aventura– (1999), entre otros textos dramáticos. A lo largo de su trayectoria acometió la adaptación de obras de grandes nombres de autores extranjeros como Peter Ustinov, Henrik Ibsen, Tennessee Williams u Oscar Wilde.
En 2005 volvió a subirse a un escenario para representar el monólogo Óscar o la felicidad de existir, adaptación de un texto de Eric-Emmanuel Schmitt. Entre sus últimos proyectos estaba escribir una obra sobre Margarita Xirgu y una novela sobre Juana de Arco.
Recientemente, Patricia O’Connor ha adaptado Usted también podrá disfrutar de ella, que ha dirigido Sam Walters en Londres, una muestra más de que sus obras están muy presentes para sus contemporáneos.
En televisión fue la primera mujer guionista de tres exitosas series: Juan y Manuela (1974), Anillos de oro (1983) y Segunda enseñanza (1986), en los tres casos como actriz principal. Anillos de oro recibió varios premios en España y en Latinoamérica y Segunda enseñanza fue seleccionada en Estados Unidos como una de las diez mejores series extranjeras del año. Además del Mayte, el Foro Teatral y el Fastenrath, ha recibido el Fotograma de Plata, el Mar del Plata y la Medalla de Oro de Valladolid.
Colaboradora habitual en diferentes medios informativos como Diario 16 y ABC, ha sido la única mujer que ha ocupado el cargo de presidente de la SGAE, que desempeñó desde 2001 hasta 2007. Además, fue Premio Max de Honor en 2013.