Desde FeSP-UGT Madrid considera «inaceptable, incluso ilegal», la oferta obligatoria de Religión Católica en el segundo curso de Bachillerato.
La aplicación de la LOE, modificada por LOMCE, deja a criterio de las Administraciones educativas, la regulación y programación de la oferta educativa en relación con el bloque de asignaturas específicas, establecido por el RD. 1105/2014, de 26 de diciembre.
La Comunidad de Madrid, en el Decreto 52/2015, de 27 de febrero, establecía que dichas materias podrían ser: Análisis Musical II, Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente, Dibujo Artístico II, Fundamentos de Administración y Gestión, Historia de la Música y de la Danza, Imagen y Sonido, Psicología, Religión, Técnicas de Expresión Gráfico-Plástica, siendo de oferta obligada por los centros las siguientes: Segunda Lengua Extranjera II, Tecnología Industrial II en la modalidad de Ciencias, por los centros que impartan dicha modalidad y Tecnologías de la Información y la Comunicación II.
Mediante Decreto 9/2018, de 6 de marzo, la Consejería de Educación e Investigación establece la oferta obligatoria, en 2º de Bachillerato, de la materia de Religión, aprovechando para ello una norma cuya finalidad es incorporar al currículum de Bachillerato lo establecido por la Ley 2/2016, de 29 de marzo, de Identidad y Expresión de Género e Igualdad Social y no Discriminación de la Comunidad de Madrid, y la Ley 3/2016, de 22 de julio, de Protección Integral contra la LGTBifobia y la Discriminación por Razón de Orientación e Identidad Sexual en la Comunidad de Madrid.
Según denuncian desde UGT Madrid, «el citado Decreto indica que en el proceso de elaboración de este Decreto, ha emitido dictamen el Consejo Escolar de la Comunidad de Madrid, lo que no es cierto, por cuanto el borrador de Decreto que dictaminó este órgano en Comisión Permanente 7/2017), que se celebró el miércoles, día 17 de mayo de 2017, no incorporaba ninguna alusión a la oferta obligatoria de Religión en 2º de Bachillerato, lo que a juicio de UGT invalida esta norma en lo que a este tema se refiere, volviendo a burlar a la comunidad educativa y al propio Consejo Escolar de Madrid las funciones que le son competentes».
Asimismo, UGT manifiesta, «una vez más, que la enseñanza de cualquier doctrina religiosa debe realizarse fuera de los centros educativos y considera que la Administración educativa mantiene un trato discriminatorio hacia los creyentes de cualquier religión que no sea la católica».