Salva Maldonado analizó la temporada 2016-17 de Movistar Estudiantes recordando que «llegué en julio con sólo un jugador en plantilla, era un reto construir un equipo y volver a enganchar» y piensa que «ese objetivo de hacer equipo se cumplió y hemos competido bien».
Para él tras un inicio «resolviendo problemas ante los que mantuvimos la calma» la llegada del año 2017 fue «un punto de inflexión» y está «contento por la temporada» aunque reconoce que «la lesión de Balvin fue un momento crítico que quizá impidió aspirar a más».
Visto con perspectiva, pienso cuando en julio fiché por Estudiantes, que había que construir el equipo entero tras el descenso y con un estado de ánimo bastante bajo… era un reto importante.
A lo largo del año nos hemos ido marcando objetivos. El primero era tener un estilo propio. Después hacer un equipo y volver a enganchar a nuestra gente, recuperar la autoestima.
Tuvimos una primera parte de temporada difícil en la cual tocó competir e ir solventando problemas. Hubo un momento con 4-11 o algo así, un momento que podría ser de nervios en el que mantuvimos bien la calma. Pero analizamos bien la situación y vimos hacia donde íbamos. Aguantamos muy bien cuando rozábamos los puestos de descenso, y la entrada del año 2017 supuso un punto de inflexión.
A partir de ahí conseguimos 9 victorias y 8 derrotas y empezamos a ver cosas, a ver resultados. Hicimos movimientos deportivos, incorporaciones, donde veíamos que había problemas y así fuimos un equipo más sólido, con cara y ojos a nivel de competición. Con mejor rendimiento.
Hemos llegado a un final con el objetivo de hacer equipo conseguido, pese a haber tenido problemas de lesiones. También hemos jugado de forma reconocible. Puede gustar o no, pero todo el mundo sabe contra quién juega cuando se enfrenta a Movistar Estudiantes.
Tuvimos un tramo final donde nos salvamos a falta de 4 jornadas, algo que visto desde el día que nos comíamos las uvas… quiere decir que hemos hecho segunda parte buena. No muy buena pero sí buena.
La pérdida de Balvin por lesión fue un momento crítico porque quizá nos podía haber lanzado más arriba, a aspirar a más. Pero sin él cumplimos en los partidos clave, logramos la 11ª posición con 13 victorias que visto con perspectiva creo que está muy bien.
Acabamos la temporada con el sentimiento, como les dije a los jugadores al acabar el último partido, de que hemos competido bien. No hemos sido arrollados, casi todos hemos competido, contra los grandes.
En otro análisis, vemos que estamos lejos de los equipos de arriba, sólo hemos ganado a tres equipos de playoff. Pero contra los equipos de nuestra liga sí hemos sido muy fiables, más en casa que ganamos a todos salvo al Betis en la jornada 1. Hemos cumplido muy bien nuestra parte. Estoy contento por haber conseguido esos objetivos, por haber construido algo a partir de cero.
Lo mejor
Ser un equipo, haber construido algo de cero, que no es fácil. Hemos construido algo, generado unas bases, con jugadores, con equipo, con formas… sobre las que seguir construyendo.
Me quedo sobre todo con que hemos sido competitivos prácticamente en todos los partidos. Ganado unos, perdido otros… pero eso denota la identidad de nuestro equipo. Es el aspecto que me tiene más contento. A nivel de institución Estudiantes ha recuperado la autoestima, hay identificación.
Próxima temporada
Acabamos esta temporada el domingo. Ahora es momento de análisis, hablar dentro del club con dirección deportiva y directiva. Este periodo de reflexión es muy importante, valorar cómo está el club y hacia donde queremos ir el año que viene. Es algo que vas pensando… pero tengo claro que esto no será como cuando aterricé en julio de 2016 con sólo un jugador y sin conocer el club, con todo por construir. Ahora empiezo a conocer bien la identidad, las cosas buenas, los vicios, las cosas intrínsecas a la identidad del club… Ahora toca periodo de análisis y ya pensaremos en el año que viene, cuando estén claras todas las competiciones, dónde y cómo se juegan…