Un operativo de la Policía Municipal de Madrid ha culminado con la detención del gerente de una tienda de alimentación en la avenida Monte Igueldo, en Puente de Vallecas, por un supuesto delito contra los derechos de los trabajadores. La intervención ha destapado una trama de empleo de personal sin documentación y graves irregularidades en las instalaciones.
La actuación policial se inició la mañana del pasado 8 de noviembre tras recibir un aviso ciudadano que alertaba sobre la presunta venta de alcohol a menores en el entorno del establecimiento. Al llegar a la zona, los agentes observaron cómo varios menores se dispersaban rápidamente.
Los agentes ingresaron en el negocio donde encontraron a tres personas desempeñando labores. Dada la dificultad de los trabajadores para comunicarse en español, los policías utilizaron una aplicación de traducción simultánea para obtener su testimonio. Fue así como dos de los individuos confirmaron que carecían de permiso de residencia y de un contrato laboral en vigor. Un tercero manifestó estar contratado a media jornada, aunque no pudo concretar sus horarios ni su salario.
El gerente ofrece versiones contradictorias
Veinte minutos después de la llegada de la autoridad, se presentó en la tienda el encargado, un hombre de nacionalidad bangladesí, nacido en enero de 1999. Antes de atender a los agentes, el hombre se dirigió directamente a la caja registradora para recaudar el dinero.
Cuando se le solicitó la documentación de la plantilla, el encargado incurrió en contradicciones: primero negó conocer a los dos empleados sin papeles, afirmando que solo tenía contratado al tercero. Posteriormente, cambió su declaración, asegurando que eran «amigos y compatriotas» que solo estaban prestando ayuda de forma voluntaria.
Irregularidades en la infraestructura y detención
La inspección reveló que las irregularidades no se limitaban al ámbito laboral. Los agentes descubrieron que existían serios indicios de que algunas personas podían estar residiendo dentro de las instalaciones del establecimiento.
A esto se sumaron requerimientos municipales ya existentes que ordenaban el cese de actividad del negocio por incumplir la normativa de protección contra incendios y por problemas de salubridad. Tras constatar la situación, los agentes procedieron al arresto del encargado por un presunto delito contra los derechos de los trabajadores.
Los dos empleados sin documentación fueron derivados a la Brigada de Extranjería. La Policía Municipal ha señalado que existe la sospecha de que el detenido pueda gestionar otros locales en el distrito, y que se mantendrá la vigilancia activa sobre estos negocios para evitar que sigan eludiendo inspecciones.

