La sanidad pública madrileña ha actualizado su respuesta asistencial y la coordinación de recursos humanos y materiales ante amenazas por riesgo biológico. Así, la Dirección General de Salud Pública y el Servicio de Urgencia Médica de la Comunidad de Madrid (SUMMA 112) han diseñado un procedimiento de actuación ante una liberación intencionada de esporas de la bacteria causante de la enfermedad infecciosa denominada ántrax.
Este último ha sido puesto hoy a prueba con un simulacro en el Hospital público Enfermera Isabel Zendal de la capital, que ha contado con la participación de personal de respuesta de alertas de la Dirección General de Salud Pública y 15 profesionales del SUMMA 112. A ellos se han sumado 22 efectivos del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) y observadores externos de la Guardia Civil, la Subdirección General de Protección Civil de la Comunidad de Madrid y de la Agencia autonómica de Seguridad y Emergencias (ASEM 112).
El ejercicio ha simulado la aplicación del nuevo protocolo ante la alta sospecha de la presencia de sustancia contaminante de tipo biológico en el interior de un sobre enviado a una empresa logística, junto con una nota amenazante. Ha comenzado con una llamada al 112 en la que se ha alertado de este suceso, tras la que se ha procedido a la activación de la Policía Nacional y el SUMMA 112 y a cursarse la correspondiente alerta de Salud Pública.
Hasta el lugar de intervención se ha desplazado el equipo de respuesta ante Incidentes NRBQ (Nuclear, Radiológico, Biológico y Químico) del SUMMA 112, compuesto por médicos, profesionales de Enfermería y Técnicos en Emergencias Sanitarias. Estos, junto con los mandos operativos del Servicio regional de emergencias sanitarias (supervisor y jefe de Guardia) y el equipo de catástrofes, han desplegado su línea de descontaminación para pacientes válidos.
Por su parte, el CNP ha desplegado un puesto de mando con especialistas TEDAX-NRBQ, accediendo al lugar donde ha sido encontrado el sobre sospechoso y realizando un primer análisis para determinar la amenaza. La Dirección General de Salud Pública, por su parte, como autoridad sanitaria, ha asistido a los agentes en la clausura de la zona de riesgo hasta disponer de los resultados de laboratorio.
La primera prueba ha determinado que su contenido eran esporas de bacillus anthracis. A continuación, las cuatro víctimas simuladas expuestas a este agente biológico han sido extraídas y descontaminadas con agentes neutralizantes y, posteriormente, valoradas clínicamente por profesionales del SUMMA 112. Después han sido dados de alta con la prescripción antibiótica profiláctica que establece el equipo de Alertas de Salud Pública para estos casos.
El simulacro ha finalizado con la descontaminación de todos los profesionales que han intervenido, a los que el Servicio de emergencia médica de la Comunidad de Madrid ha prescrito la misma protección, pese a haber actuado con los preceptivos equipos de protección individual.
El ejercicio también ha incluido el envío de la sustancia sospechosa al laboratorio del Instituto Carlos III para su análisis definitivo. El procedimiento, asimismo, establece que el CNP se encarga de la investigación judicial, mientras que Salud Pública es responsable del seguimiento de los afectados y del resultado de análisis definitivo del compuesto.
Amenaza ántrax
El ántrax se contrae mediante la exposición a las esporas de la bacteria, bien por contacto directo con una herida o tejido dañado o por inhalación, y presenta un bajo riesgo de contagio entre personas. La principal amenaza obedece a su inhalación. El tratamiento con antibióticos es altamente efectivo cuando se aplica de manera precoz, de ahí la importancia de este tipo de entrenamientos.
Si bien en otros países se han producido episodios de bioterrorismo de este tipo, hasta la fecha en España no se ha identificado ninguna liberación intencionada, aunque en los últimos años se han activado diversas alertas por paquetes sospechosos de contenerlas.

