El Consejo de Ministros del Gobierno de la República de Portugal ha decidido adelantar a 2034 la finalización del enlace ferroviario de alta velocidad (LAV) entre Lisboa y Madrid, en coordinación con España.
La decisión pretende, a su juicio, ofrecer una alternativa competitiva de transporte ferroviario (en concreto, con el avión), estableciendo como objetivo los siguientes tiempos de viaje: Oporto-Lisboa – 1 hora y 15 minutos; Lisboa-Madrid – 3 horas; y Oporto-Vigo – 50 minutos.
La línea de alta velocidad (LAV) ofrecerá, según el Gobierno portugués, una alternativa ferroviaria competitiva a los vuelos diarios, con 40 vuelos entre Lisboa y Madrid y alrededor de 20 entre Oporto y Lisboa.
Lisboa-Elvas
En su impacto nacional, reducirá el tiempo de viaje Lisboa-Elvas a aproximadamente 2 horas en 2025 y aproximadamente a 1 hora en 2034, cuando toda la ruta esté operativa. Actualmente, la conexión entre Évora y Elvas está en construcción y debería entrar en servicio en 2025.
También deberá construirse el tercer cruce del Tajo en Lisboa (TTT) hacia Poceirão y la conexión entre Poceirão y Elvas. La línea de alta velocidad tendrá plena complementariedad con la red ferroviaria convencional y con la red ferroviaria española vecina ancho, suministro eléctrico y sistemas de señalización.
Lisboa-Madrid
En la conexión entre Lisboa y Madrid, la línea de alta velocidad reducirá el tiempo de viaje, según el Gobierno portugués, a 6 horas en 2027 y a 3 horas en 2034, cuando toda la ruta esté operativa.
Esta línea incluye la conexión Badajoz-Placencia y Toledo-Madrid, está en construcción la conexión Évora-Elvas (Caia) y la conexión Placencia-Talayuela (que entrará en servicio en 2027), y está en construcción la TTT, la conexión Poceirão- Conexión Évora y la conexión Talayuela-Toledo.
Los calendarios de las inversiones serán compatibles con España, para garantizar una ejecución coordinada y oportuna del proyecto, optimizando plenamente la disponibilidad de financiación europea.
Eficiencia energética
La decisión adoptada ahora por el Gobierno de Portugal de acelerar la construcción de la LAV Lisboa-Madrid radica en «la necesidad de la descarbonización del transporte, el paso a modos de transporte más eficientes energéticamente, el desarrollo económico y la cohesión territorial y social».
Este Enlace de Alta Velocidad, que cumple con el Programa Nacional de Inversiones 2030 y el Plan de Trabajo del Corredor Atlántico, «permitirá también impulsar decisivamente el sector ferroviario en Portugal».
La decisión contribuye también a alcanzar el objetivo marcado por la Comisión Europea en la Estrategia de Movilidad Inteligente y Sostenible de duplicar el tráfico ferroviario de pasajeros de alta velocidad, implementando también el Pacto Verde de la UE y el Acuerdo de París sobre cambio climático.