La Comunidad de Madrid atiende diariamente a 340.000 usuarios en los más de 430 centros de salud y consultorios locales de la región. En ellos, durante 2023, sus profesionales llevaron a cabo 84 millones de actuaciones, de las cuales más de 25 corresponden a consultas de Medicina de Familia, alrededor de 16 a Enfermería, y casi 4 a Pediatría.
Estos datos los ha dado a conocer hoy la consejera de Sanidad, Fátima Matute, durante la visita que ha realizado a la jornada de puertas abiertas del dispositivo Goya de la capital, que da cobertura a 60.000 madrileños, con motivo de la celebración, este viernes, del Día Nacional de la Atención Primaria.
“Este es uno de los que más servicios ofrece, entre ellos, matrona, odontología, fisioterapia y psicología”, ha señalado Matute, que ha añadido que “en un día como hoy, es importante subrayar el trabajo que hacen los más de 14.500 profesionales de Atención Primaria. Profesionales que no solo nos curan, sino que nos conocen y nos cuidan”.
El resto de las prestaciones de este primer nivel asistencial de la sanidad pública madrileña el año pasado se reparte entre las tramitaciones realizadas por auxiliares administrativos, con más de 35 millones, y las de las Unidades de Atención Específica (matronas, higienistas dentales, odontólogos, trabajadores sociales, fisioterapeutas y psicólogos), con alrededor de 2,7.
También destaca la labor llevada a cabo fuera de los propios centros de salud, como la que desempeñan las 23 Unidades de Atención a Residencias (UAR), formadas por personal de distintas disciplinas y que prestan servicio en 535 residencias de mayores y de discapacidad. O la que desarrolla el Centro de Atención Telefónica, donde se resuelven tanto problemas sanitarios que no requieren visita presencial, como en el caso de las gestiones administrativas.
Igualmente, los siete equipos de Soporte de Atención Paliativa Domiciliaria (ESAPD), además de asistir a los pacientes, ofrecen apoyo a sus familias en coordinación con los demás estamentos de la Consejería de Sanidad. También, los centros de continuidad asistencial o Puntos de Atención Continuada, con más de 750.000 servicios anuales.
Capacidad resolutiva
A las mejoras efectuadas en el último año, como la implantación de agendas de absorción de la demanda, se suman otras en desarrollo para incrementar, mejorar y acelerar la capacidad diagnóstica, evitar desplazamientos innecesarios y reducir la ansiedad de los usuarios ante posibles sospechas de patologías.
Así, por ejemplo, se ha ampliado el catálogo de pruebas de laboratorio, que ahora permite obtener nuevas valoraciones en los análisis de sangre y test PCR rápidos para determinar el tipo de infección. Y otro proyecto piloto que se está llevando a cabo en colaboración con el Hospital público Universitario Gregorio Marañón consiste en que el facultativo del centro de salud pueda solicitar directamente una prueba de TAC craneal, torácica o resonancia lumbar.
Nuevos equipamientos
Desde 2023, la Gerencia de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid trabaja en la renovación y adquisición de nuevos equipos para incrementar la capacidad asistencial. Así, se han adquirido 269 bilirrubinómetros para la detección de ictericia recién nacidos; 46 retinógrafos para identificar problemas oculares, similar equipamiento en tonómetros para medir la tensión ocular y 885 otoscopios, para analizar el conducto auditivo y el de tímpano.
Este plan también incluye la adquisición de 2.741 tensiómetros digitales, 415 espirómetros que miden el funcionamiento de los pulmones, 4.068, pulsioxímetros para controlar la saturación de oxígeno y 576 ecógrafos. Estos equipamientos cuentan con financiación estatal.
El Gobierno regional prosigue, además, con iniciativas para facilitar y ordenar el acceso a las consultas, como la gestión de turnos mediante dispensación de ticket, ya implantada en 100 centros de Primaria. En paralelo se está actuando para mejorar e impulsar la Enfermería Familiar y Comunitaria con el reconocimiento de esta categoría profesional durante este año. Servirá, entre otras, para fortalecer la atención domiciliaria desde los centros y, en especial, en los cuidados de las personas mayores y pacientes crónicos en situación de vulnerabilidad. La Consejería de Sanidad también trabaja en la creación de la figura del administrativo sanitario y la revisión de las funciones de los celadores.