Los servicios de Emergencias del Ayuntamiento de Madrid han querido poner en valor que la llamada cadena de la vida «funciona». Un hombre de 40 años sufrió una parada cardiorrespiratoria en el Centro Deportivo Municipal Wilfred Agbonavbare, en el distrito madrileño de Puente de Vallecas.
Ante ello, los empleados del centro emplearon un desfibrilador instalado en el lugar, y con la primera descarga lograron devolverle el pulso. A continuación, sanitarios del SAMUR-Protección Civil atendieron a la víctima, en estado consciente, siendo estabilizado y trasladado al Hospital Gregorio Marañón, donde le fue practicado un cateterismo.
«Todos los integrantes de esta cadena se ponen en marcha de una forma precoz y eficaz y consiguen que el paciente salga adelante sin secuelas», han incidido en un comunicado desde Emergencias del Ayuntamiento de Madrid.