El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, acompañado de la vicealcaldesa y delegada de Seguridad y Emergencias, Inma Sanz, y el concejal de Moncloa-Aravaca, Borja Fanjul, se ha reunido hoy por primera vez con los mandos de la nueva Sección de Protección del Patrimonio Urbano de la Policía Municipal de Madrid (SEPROPUR), que ha comenzado a trabajar esta misma semana para defender el patrimonio de la capital ante cualquier acto que produzca su degradación, bien sea la vandalización estética de las pintadas y grafitis incívicos como los daños ocasionados por esas inscripciones.
En el encuentro, celebrado en la Jefatura de la Policía Municipal, Almeida se ha interesado por las funciones y los primeros pasos de la nueva sección, puesta en marcha en tiempo récord tras ser uno de sus compromisos electorales.
La nueva sección cuenta con 39 efectivos en total, 12 agentes y un mando en cada uno de los tres turnos (mañana, tarde y noche), que permitirán prestar servicio durante las 24 horas del día y todos los días del año. Los policías municipales destinados a esta sección, mediante planes de actuación basados en el diagnóstico y en mapas de riesgo de los espacios públicos de la ciudad afectados, llevarán a cabo una respuesta reactiva de la mano de las comisarías integrales de distrito (CID), así como funciones de análisis de daños, identificación de las autorías y, en su caso, demandas de la restitución de los daños causados. Su marco territorial de actuación será el conjunto de la ciudad, fijando inicialmente puntos y ubicaciones especialmente vulnerables.
Funciones específicas
Además del diagnóstico territorial y los mapas de riesgo, los policías municipales de esta sección realizarán un registro de imágenes y localización de los grafitis existentes; investigarán junto a los servicios policiales de grafología su posible autoría (especialmente aquellos que puedan afectar al patrimonio histórico); tramitarán de manera centralizada todos los atestados; centralizarán la recepción de las denuncias administrativas que se tramiten por las diferentes comisarías, creando una base de datos de estas acciones lesivas para el patrimonio; mantendrán un estrecho contacto con el Área municipal de Limpieza para establecer los procedimientos de restitución del bien dañado y con los administradores de fincas en aquellos espacios privados cuyas fachadas sean objeto de pintadas, y asesorarán a las distintas comisarías del cuerpo y recabarán su colaboración en todas aquellas cuestiones de su competencia.
La Sección de Protección del Patrimonio Urbano de la Policía Municipal forma parte de la Comisaría de Medio Ambiente y Patrimonio, en concreto de su equipo de Policía Judicial, y trabajará en coordinación con las CID de Policía Municipal, así como con el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad, de quien depende el Área Delegada de Limpieza, con quienes se configurará un mapa de riesgo y con la Fiscalía de Medio Ambiente y Urbanismo para desarrollar procedimientos y actuaciones ágiles y efectivas, además de con todas aquellas estructuras que se precisen para conseguir una mejora sustancial en la percepción de seguridad derivada del vandalismo patrimonial.
Más limpieza contra las pintadas
Esta nueva sección se suma a la puesta en marcha, en septiembre del año pasado, de las patrullas ‘antigrafitis’ habilitadas por el Área de Medio Ambiente y Movilidad: un nuevo Servicio Público de Limpieza Urgente (SELUR) dotado de más medios (tras incrementarse en un 158 % el presupuesto del contrato anterior y la plantilla un 69 %, lo que supone 55 efectivos en 12 equipos específicamente para las patrullas antigrafitis) para agilizar y hacer más eficientes las intervenciones. Entre otros servicios, incluyen estas patrullas especializadas que responden a los avisos de los vecinos para eliminar las pintadas, además de revisar periódicamente las zonas de los distritos donde su aparición es habitual. Asimismo, retiran las pintadas sobre superficies metálicas, metacrilatos y plástico, que hasta entonces no se cubrían.
Durante 2021, en Madrid se realizaron servicios municipales de limpieza para eliminar pintadas vandálicas sobre 167.693 metros cuadrados de fachadas de edificios, que se elevaron en 2022 a 321.862 metros cuadrados (un 92 % más que el año anterior). En lo que va de año, esta limpieza sobre fachadas pintadas alcanza ya los 561.500 metros cuadrados, un 74,4 % más que en 2022.
Incremento de las sanciones
Las sanciones por realizar estos actos vandálicos se rigen por el artículo 20 de la Ley 3/2007 de Medidas Urgentes de Modernización del Gobierno y la Administración de la Comunidad de Madrid. En diciembre de 2019, el equipo de Gobierno municipal endureció los importes por esta infracción, atendiendo a los márgenes que permitía la legislación. Algunas multas se llegaron a duplicar o triplicar. Así, por ejemplo, en el caso de las pintadas sobre los cierres comerciales o elementos asociados a actividades económicas, se elevó de 500 a 1.000 euros; sobre mobiliario urbano, muretes o pilares y puertas, de 300 a 600 euros y en edificios emblemáticos, las multas por pintadas de menos de un palmo ascienden a 2.000 euros y las que lo superan, a 3.000 euros.
Las denuncias por parte de Policía Municipal de Madrid en materia de suciedad en vía pública, entre las que se encuentran las de suciedad por grafiti, ascendieron a 695 en el año 2022 y a 809 en lo que va de año. Asimismo, y en cuanto a actuaciones en materia de daños al patrimonio, en 2022 se realizaron 714 actuaciones y se han efectuado 414 hasta septiembre de este año.
Además, durante 2022 el Cuerpo de Policía Municipal de Madrid efectuó 73 intervenciones con personas detenidas e investigadas por daños contra el patrimonio y 26 hasta septiembre de 2023.
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[…] el presupuesto anterior (de 8,9 millones anuales se pasó a 23), permitiendo la creación de las patrullas específicas para la eliminación de […]