La Empresa Municipal de Transportes de Madrid acaba de hacer pública la licitación para el suministro de 10 autobuses de pila de combustible propulsados por hidrógeno verde que circularán por las calles de Madrid el año próximo.
El pliego técnico de esta licitación pública detalla que se trata de 10 autobuses estándar (12 metros de longitud) de pila de combustible alimentados con hidrógeno verde por un montante de 640.000 euros por cada unidad. Esta adquisición ha contado con financiación procedente de los fondos europeos NextGeneration EU a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Los vehículos deben tener una autonomía suficiente para realizar una jornada completa de trabajo, al menos 280 kilómetros o 20 horas, y un tiempo de recarga de las pilas estimado de 5 a 10 minutos. De igual modo, estos modelos deberán contar con prestaciones similares a cualquier otro autobús estándar eléctrico o de gas natural (GNC), además de ir equipados con espejos retrovisores dotados de cámaras.
Así, la EMT avanza de forma decisiva en su innovador proyecto de hidrógeno verde para el transporte público de la ciudad de Madrid, apostando por el H2 como vector energético fundamental para la movilidad sostenible.
Además, la empresa municipal construirá una hidrogenera, así como la instalación fotovoltaica que la abastecerá, en el Centro de Operaciones de Entrevías. Un proyecto cuya inversión asciende a 10,8 millones de euros. Esta actuación está financiada por la Unión Europea ya que, por primera vez, la EMT ha obtenido acceso a los fondos FEDER que supondrán una inyección de financiación de 2,9 millones de euros.
Esta nueva estación de repostado permitirá dotar de varios puestos de recarga de hidrógeno verde para la flota de diez autobuses que la EMT utilizará en una primera fase. El proyecto supone la puesta en marcha de las instalaciones necesarias para la producción, el almacenamiento y la distribución del hidrógeno. También contempla la instalación y puesta en funcionamiento de las placas fotovoltaicas capaces de generar toda la energía necesaria para la producción del H2 a partir de fuentes renovables.
La EMT y la innovación
Ya en el año 2002, la EMT fue el primer operador del transporte español en poner a prueba la explotación de autobuses de pila de combustible alimentada por hidrógeno gracias a los proyectos comunitarios CityCell y HyFleet:CUTE.
En 2020, la empresa municipal vuelve a plantearse las ventajas del uso de este combustible limpio y firma una alianza estratégica con el Centro Nacional del Hidrógeno y Pila de Combustible (CNH2) con el objetivo de favorecer el desarrollo e implantación de tecnologías aplicadas a este combustible. El CNH2 es un espacio de investigación de ámbito nacional orientado a impulsar la investigación de las tecnologías del hidrógeno y las pilas de combustible.
El uso del hidrógeno como combustible es un proyecto estratégico de especial importancia en los planes de la Empresa Municipal de Transportes. Tanto el nuevo Plan Estratégico de la EMT, que regirá el rumbo de la organización hasta 2025, como la Estrategia Medioambiental Madrid 360 contemplan como objetivo una empresa verde y descarbonizada con un modelo energéticamente sostenible. Para lograrlo, la transformación de la flota es un hito fundamental y en diciembre de este año se terminarán de retirar los vehículos diésel y la flota municipal solo prestará servicio con autobuses eléctricos y de gas natural.