El último de los tres pasos inferiores de las obras de remodelación del Nudo Norte se abrirá y pondrá en servicio para el tráfico a partir de esta medianoche. El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha visitado esta mañana la infraestructura por la que comenzarán a circular vehículos a partir de las 00:00 horas y ha informado de que las obras se darán por finalizadas por completo antes de que termine el mes.
En la visita ha estado acompañado por el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, y los concejales de Fuencarral-El Pardo, Javier Ramírez, y Chamartín, Sonia Cea, distritos por los que discurre este túnel. El regidor madrileño ha explicado que ya solo queda un último acceso por reabrir: el de la A-1 (carretera de Burgos) en dirección M-30/M-607 y dirección paseo de la Castellana.
El nuevo paso inferior que esta noche se habilita dará cobertura a este tramo que abrirá durante los próximos días, así como el nuevo carril en superficie en dirección al paseo de la Castellana. Como fecha límite, el 30 de noviembre será cuando se den por terminadas las obras del Nudo Norte, cumpliéndose el plazo de ejecución previsto, menos de 24 meses.
Este nuevo viario, por donde pasarán 27.000 vehículos diariamente, permitirá la conexión directa del tráfico rodado entre la A-1 (carretera de Burgos) y la M-11 (recintos feriales) con destino la M-30/avenida de la Ilustración y M-607 (carretera de Colmenar). Con esta actuación, se elimina un importante punto negro del viario municipal, aliviando la congestión de tráfico que se produce, fundamentalmente, a la hora punta de la mañana y de la tarde en la entrada a la ciudad por la A-1 y M-40/M-11.
Según ha explicado el alcalde, se trata de una “obra imprescindible que había que acometer, determinante para garantizar la movilidad de todo el arco norte de la ciudad de Madrid tanto desde el punto de vista de eliminar los trenzados, causantes de los atascos, como de la generación de las infraestructuras necesarias”.
Cuatro estructuras para suprimir los trenzados
Por el conjunto del Nudo Norte circulan 34.000 vehículos diarios durante la hora punta de la mañana, de 8:00 a 9:00 horas, y 33.800 vehículos en la franja pico de la tarde, de 18:00 a 19:00 horas. Este nudo viario es utilizado por más de 270.000 vehículos al día. Con esta obra se consigue, tal como ha señalado Almeida, no solo reducir el tiempo de los traslados, sino también la emisión de CO2 a la atmósfera, con 14 toneladas menos en este punto.
El problema de este eje viario de gran capacidad era la confluencia mediante trenzados en la M-30 y la M-607 (autovía de Colmenar Viejo), el paseo de la Castellana, la M-11 y la A-1, siendo el tramo entre este nudo y el enlace de Manoteras uno de los de mayor intensidad de tráfico de España.
El proyecto de remodelación, con un presupuesto final de 50 millones de euros (IVA incluido), ha contemplado las obras de adecuación en todas sus conexiones para eliminar los cuatro trenzados, que son los que provocaban la pérdida de capacidad de las vías y grandes atascos. El objetivo, disminuir la congestión del tráfico en hora punta en este enclave de Madrid, ya que su influencia afecta al resto de la ciudad.
Para ello, se han construido cuatro estructuras:
- El viaducto de conexión directa entre la carretera de Colmenar (M-607) y el paseo de la Castellana, que se finalizó en febrero de este año.
- El paso inferior de conexión directa entre la Castellana con la A-1 (carretera de Burgos) y la M-11 (recintos feriales), que culminó en mayo de 2022.
- El paso inferior de conexión directa entre el paseo de la Castellana con la avenida de la Ilustración/M-30, inaugurado en septiembre.
- El último, el que hoy ha visitado el alcalde, el paso inferior de conexión directa entre la A-1 (carretera de Burgos) y la M-11 con la M-30 (avenida de la Ilustración) y M-607 (carretera de Colmenar).
Características del nuevo paso inferior
El nuevo paso inferior tiene 300 metros de longitud y una anchura de 8 metros divididos en dos carriles de circulación de 3,50 metros de anchura cada uno y dos aceras de medio metro. Este paso lleva anexa una galería de más de 40 m2 de sección que alberga dos tuberías a presión de 2 metros de diámetro que forman parte de la red de abastecimiento de agua del Canal de Isabel II y que ha sido necesario retranquear para poder ejecutar este nuevo paso.
Este paso inferior se ha realizado con los más elevados estándares en instalaciones de túneles urbanos, contando con sistemas de ventilación mecánica, de detección de incendios, detección de gases, control de accesos y gálibo, sistema de alimentación ininterrumpida, iluminación de seguridad, iluminación de emergencia, así como otros sistemas de seguridad.
Al igual que en los otros dos pasos inferiores, todos estos sistemas han sido centralizados mediante un sistema de Seguridad y Control (ITS) que permitirá controlar todos los equipos y señales de forma remota desde el Centro de Control de Tráfico de Calle 30 a través de tecnología punta que dota a la nueva calzada de una elevada seguridad.