La Comunidad de Madrid ha sacado a concurso el servicio de seguridad de la red de Metro para los cuatro próximos años, en el periodo comprendido entre 2023 y 2026, con un mega-contrato de 338 millones de euros, casi 100 millones más que el anterior de 2017, que pretende reforzar el número de vigilantes, llegando a doblar su número en algunas de la estaciones, y la adquisición de vehículos de apoyo en el exterior, con servicios diurnos y nocturnos.
La convocatoria para la licitación del contrato se hizo pública en el Boletín oficial regional (BOCM) este 1 de junio, con un plazo para la presentación de ofertas abierto hasta el 29 de junio, y deberá estar adjudicado a finales del mes diciembre. El pliego está dividido en cinco lotes correspondientes a las líneas que conforman la red y otros recintos propiedad de la compañía, y prevé la posibilidad de suscribir una prórroga de un año, además de los cuatro que se establecen en los pliegos
En el pliego del nuevo mega-contrato sacado a concurso se justifica este fuerte incremento de presupuesto y efectivos por el «posible incremento en las horas de servicio a los viajeros, a causa de la apertura durante las 24 horas los días vísperas de festivo y fines de semana». Metro de Madrid ya abrió durante una semana las 24 horas del día, en enero del 2021, ante la situación excepcional provocada por el temporal de nieve como consecuencia de la Borrasca Filomena.
Sin embargo, más allá de aperturas de 24 horas de forma puntual, en 2019 se llegó a plantear seriamente desde la parte de Ciudadanos del Gobierno regional, especialmente desde la Consejería de Transportes, que pertenecía a la formación naranja. Entonces se estimó en 60 millones de euros la apertura 24 horas los fines de semana. Pero tras la expulsión de Ciudadanos del Gobierno, la iniciativa quedó en un cajón.
Pero la posible apertura 24 horas no es la única justificación para este importante aumento en la seguridad del suburbano. Desde la Comunidad de Madrid se expone la necesidad de incorporar más personal de seguridad ante las ampliaciones previstas en las líneas 3, 5 y 11 o los nuevos intercambiadores de Conde de Casal y Valdebebas.
Desde el suburbano se señala también el gran impacto que produce el estadio Wanda Metropolitano «donde es necesario dar cobertura de seguridad a los movimientos masivos de aficionados» y el fuerte incremento en Madrid de grandes eventos, especialmente tras la pandemia, lo que aconseja el aumento de la vigilancia y la apertura durante las 24 horas los días vísperas de festivo y fines de semana. Solamente en 2019 se actuó ante más de 1.400 eventos, realizándose 684 operativas de seguridad exclusivas por el impacto en el Metro.
Este nuevo mega-contrato sacado a concurso refleja un incremento del precio de los servicios de vigilancia, pasándose de alrededor de 21,50 euros cada hora actuales a unos 24,00 euros, unos 3,50 euros más. Finalmente, y por primera vez en este tipo de contratos, las características técnicas pasarán a tener más peso que el resto a la hora de adjudicar a una empresa o a otra, representando el 60% frente al 40% de las características económicas.
