El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha inaugurado esta tarde los jardines de los Huérfanos de la Guardia Civil, ubicados en la calle Puerto Rico número 25 del distrito de Chamartín. Acompañado de la concejala del distrito, Sonia Cea, y del general de División de la Primera Zona de la Guardia Civil, José Antonio Berrocal, el alcalde ha descubierto un monolito levantado en reconocimiento a los hijos de los guardias civiles fallecidos.
Almeida ha destacado que, con este acto, Madrid y en concreto el distrito de Chamartín está pagando una deuda de gratitud que la ciudad tiene con la Guardia Civil, “faro moral para el conjunto de los españoles, que nos guía para construir una España y una sociedad mejor desde la memoria de todos aquellos que fueron capaces de dar su vida para garantizar nuestra libertad, nuestra seguridad, nuestra democracia y nuestro Estado de derecho”.
Por su parte, Sonia Cea ha recordado que “ETA se ensañó especialmente con Chamartín” en 1985, cuando hizo estallar una bomba en la plaza de la República Argentina contra un autobús de la Guardia Civil, llevándose la vida de 16 agentes y unos meses después, asesinó a 12 chavales que tenían el sueño de ser guardias. Por eso, “este parque sirve para honrar a héroes, un parque para no olvidar lo que este país perdió para lograr lo que ha sido”.
Durante el acto, al que han asistido miembros del Gobierno municipal y representantes de los grupos municipales, dos jóvenes pertenecientes al Colegio de Huérfanos de la Guardia Civil han depositado una corona de laurel junto al monolito “en reconocimiento a los hijos de los guardias civiles de todos los tiempos que en su día lucharon con valor, sirvieron con lealtad y murieron con honor”.