Las farmacias de la Comunidad de Madrid podrán vender desde este martes, 20 de julio, test rápidos de autodiagnóstico del COVID-19 para hacer en casa y que no necesitarán receta ni prescripción médica.
Dichos test de detección del coronavirus tendrán un coste de entre 3 y 7 euros y su venta libre de control médico tendrá como objetivo la detección del mayor número de positivos por coronavirus en la Comunidad de Madrid.
Estos test permiten al usuario realizarse la prueba en su propio domicilio y con un leve pinchazo en la yema del dedo. Tras 10 minutos de espera se conocerá el resultado, cuyo grado de fiabilidad es del 90%. Sin embargo, en caso de dar positivo será obligatoria la realización de un test PCR complementario para confirmar el resultado.
Todo ello ha hecho levantarse el temor entre la comunidad científica: por un lado que se hagan de forma incorrecta ante la falta de guía de un médico; y por otro que, en caso que de positivo, el afectado decida «ocultarlo» para así no someterse a las medidas de aislamiento pertinentes tras la detección de un caso.