Arranca la prolongación de la L5 de Metro y la creación del intercambiador de Conde de Casal

Gacetín Madrid

La Comunidad de Madrid pone en marcha la prolongación de la línea 5 de Metro desde Alameda de Osuna hasta la nueva terminal del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas que va a unificar las actuales T1, T2 y T3.

El Consejo de Gobierno ha autorizado hoy la contratación de la redacción del proyecto constructivo y trámites ambientales que conlleva. Este cuenta con una inversión de 1,2 millones de euros y un plazo de ejecución de 14 meses.

En concreto, se incluyen todos los trabajos previos de diagnóstico de la situación actual necesarios para la selección y definición del método constructivo que se empleará. Asimismo, comprende la elaboración de la documentación necesaria para la evaluación de impacto ambiental.

La línea 5 de Metro se va a prolongar desde la estación de Alameda de Osuna hasta una nueva estación que se construirá en la nueva terminal del aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas. Está previsto que esta terminal unifique las actuales T1, T2 y T3. De este modo, la nueva estación de Metro actuará como intercambiador, puesto que también estará conectada con la actual estación Aeropuerto T1-T2-T-3 de la línea 8, que continúa hasta la T4.

Financiación Europea

El proyecto de la prolongación de la línea 5 hasta el aeropuerto es uno de los que ha presentado la Consejería de Transportes, Movilidad e Infraestructuras para obtener financiación del Fondo de Recuperación Europeo.

La Comunidad de Madrid aspira a lograr apoyo financiero de este fondo para proyectos que suman más de 5.000 millones de euros de inversión, con el objetivo de transformar la movilidad de la región y agilizar su digitalización y para que actúen como palanca para la recuperación económica.

La nueva estación de la línea 5 en el aeropuerto se diseñará con los mismos parámetros que los aplicados en las ampliaciones más recientes de la red de Metro de Madrid: será completamente accesible, con escaleras mecánicas y ascensores para garantizar la movilidad entre los andenes, la calle y los distintos niveles de las terminales del aeropuerto.

El proyecto, que implica prolongar la línea en alrededor de 1,5 kilómetros, supondrá una inversión que se estima que rondará los 75 millones de euros. Los trabajos deben compatibilizarse con la nueva terminal planificada por AENA. Un nuevo nodo de acceso para las terminales 1, 2 y 3 para la distribución de pasajeros, facturación y recogida de equipajes y controles de seguridad.

El Gobierno regional está ya en contacto con AENA para coordinar los trabajos y acordar fórmulas de colaboración para la nueva infraestructura, tanto la prolongación de la línea como la estación). Una vez que comiencen las obras, se prevé un plazo estimado de ejecución de 24 meses.

Acceso directo a Barajas

La prolongación de la línea 5 permitirá un nuevo acceso directo entre la ciudad de Madrid y el aeropuerto, a través de una de las líneas más demandas de Metro. Es la cuarta más utilizada de la red (en 2019 captó el 10,6% del total de viajeros) y mueve 72,2 millones de viajeros al año.

Se trata de una línea que cruza todo Madrid en el eje nordeste-suroeste (hasta Casa de Campo), con 32 estaciones, incluidas algunas en pleno centro de la ciudad (como Gran Vía, Callao y Ópera) y con conexiones con la red de Cercanías (como Acacias, Pirámides o Aluche).

El proyecto beneficiará a los cerca de 62 millones de personas que ya utilizan el aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas cada año y, sobre todo, a las más de 40.000 personas que trabajan en el aeródromo, ya que un alto porcentaje de ellas vive en las inmediaciones de la línea 5.

Las primeras estimaciones realizadas por la Consejería de Transportes apuntan a que, con la prolongación de la línea 5, el número de viajes en las estaciones de Metro de Aeropuerto T1-T2-T3 y Aeropuerto T4 podría crecer un 50%. Estas dos estaciones suman 9,45 millones de viajes al año.

Nuevo intercambiador de Conde de Casal

Por otro lado, la Comunidad de Madrid ha dado el primer paso para la creación del nuevo intercambiador de transporte de Conde de Casal. El Consejo de Gobierno ha autorizado hoy al Consorcio Regional de Transportes de Madrid la contratación de la redacción del proyecto básico y de ejecución de la infraestructura, con una inversión de más de medio millón de euros hasta 2022.

En este intercambiador se van a ordenar 24 líneas de autobuses, 8 de urbanos y 16 de interurbanos, mejorando la seguridad y accesibilidad de los usuarios del transporte público y beneficiando notablemente la circulación en la plaza de Conde de Casal.

Además, con la construcción de esta infraestructura intermodal para el corredor de la A-3, todas las entradas y salidas de Madrid por las carreteras nacionales van a contar con un gran intercambiador. Será el sexto gran intercambiador de la ciudad, junto a Príncipe Pío, Moncloa, Plaza de Castilla, Avenida de América y Plaza Elíptica.

Este contrato es el paso previo para la licitación y adjudicación de las obras del nuevo intercambiador, que va a contar con una terminal de autobuses en superficie y la estación de Metro de Conde de Casal de la línea 6, que se ampliará con la llegada también de la línea 11 a este punto.

Integrado en la línea diagonal de Madrid

Precisamente, en el contrato aprobado hoy se precisa que la nueva infraestructura intermodal debe tener en cuenta las condiciones definidas en el proyecto de la Línea Diagonal de Madrid, que supone la prolongación de la línea 11 de Metro de Madrid para unir Cuatro Vientos con los nuevos desarrollos de Valdebebas.

El nuevo intercambiador forma parte de la ampliación de la línea 11 en el tramo comprendido entre Plaza Elíptica y Conde de Casal, que ya cuenta con declaración favorable de impacto ambiental y cuyas obras está previsto iniciar en 2022. Posteriormente, la línea se extenderá desde esta estación hacia Mar de Cristal y hacia Valdebebas.

La Línea Diagonal de Madrid es uno de los proyectos que la Consejería de Transportes, Movilidad e Infraestructuras presenta para obtener financiación del Fondo de Recuperación y Resiliencia de la Unión Europea dentro de su estrategia de transformación de la movilidad hacia un modelo más sostenible, innovador y de vertebración social y territorial.

Así, la línea 11 será un nuevo eje, de 33,5 kilómetros, que atravesará la ciudad de suroeste a nordeste y favorecerá la descentralización de la movilidad en Madrid, configurando una alternativa de transporte público que evita el paso obligado por las áreas centrales de la ciudad y que mejora la conexión de barrios, como el PAU de Carabanchel o los nuevos desarrollos de Valdebebas, con una alternativa más directa y con menor número de transbordos.

El proyecto servirá también para descargar las líneas 6 y 10, al facilitar intercambios con el mayor número posible de líneas de Metro y generar rutas alternativas y más directas para los viajeros.

E impulsará la intermodalidad, al conectar siete de los principales intercambiadores y áreas de intercambio modal con los que contará la ciudad: Cuatro Vientos, Plaza Elíptica, Atocha, Conde de Casal, Mar de Cristal, Valdebebas-Ciudad de la Justicia y Aeropuerto T-4.

Te puede interesar

Comentarios