CCOO considera «intolerable» la decisión de congelar plantillas «sin tener en cuenta que ya estaban infradotadas de personal y ante las necesidades que crea la desescalada».
CCOO Sanidad Madrid ha pedido al Gobierno de la Comunidad de Madrid que frene los Expedientes de Regulación de Empleo (ERTE) que están planteando, desde hace semanas, las empresas de gestión de residencias de mayores y dependientes, privadas y concertadas.
A pesar de que las residencias «están infradotadas de personal y parte de sus plantillas están aún de baja laboral por contagio de COVID-19 o por aislamiento por contacto de riesgo, los empresarios del sector no han dudado en solicitar ERTE para sus mermadas plantilla».
El sindicato recuerda que «la escasez de personal, lo que se conoce como las ratios de plantilla para la atención debida a los usuarios de estos centros, ha sido uno de los motivos por los que el coronavirus se ha cebado con residentes en la Comunidad de Madrid». Los datos que maneja CCOO indican que se han superado los 12.000 fallecidos.
CCOO muestra su preocupación porque «cada día aumenta el número de empresas que están haciendo uso de esta herramienta habilitada por el Gobierno del Estado para el cierre temporal de negocios o reducción de plantillas, que se han visto obligados cerrar o reducir temporalmente su actividad por la pandemia».
«Con el ERTE se garantizan los salarios de empleados y empleadas por cuenta ajena y la vuelta al trabajo, una vez concluya la situación excepcional». Pero ésta “no es la situación en la que se encuentran la mayoría de las residencias, que han comunicado ERTE, porque no se puede reducir personal cuando ya es escaso el que tienen contratado”, señalan los responsables sindicales.
Riesgo en la desescalada
Asimismo, CCOO plantea «la inseguridad que se crea en el sector porque no refuerza sus plantillas sino que además las reduce durante la desescalada por medio de los ERTEs. Alerta de que disminuir personal incrementa más el riesgo de contagio entre los residentes». Durante las fases de salida del confinamiento «es preceptivo que los usuarios que presentan síntomas, estén en zonas aisladas de los que están libres de COVID-19 o sin sospecha alguna».
También es obligatorio respetar la distancia social y «esto se hace muy difícil cuando los residentes no son conscientes de esa norma y tienen que estar supervisados, en todo momento, por el personal para que se lleve a cabo la medida. Hay que recordar que en estos centros se trabaja con personas dependientes, que tienen algún tipo de demencia o no tienen su capacidad cognitiva completa».
Por todas estas circunstancias, «se hace más necesario que nunca exigir que se cumplan las ratios óptimas y que haya suficientes profesionales que puedan atender adecuadamente a los y las residentes, manteniendo las normas de seguridad y los turnos para aseo o comida».
Además «no se debe olvidar la importancia de la limpieza y desinfección de las zonas comunes que van a utilizar los residentes y que deben tener una limpieza constante y exhaustiva». Si las Administraciones «permiten de nuevo incumplimientos dentro de estos centros, corremos el riesgo de que la pandemia rebrote. Precisamente estos centros han sido los principales focos de contagio y de mortalidad en la Comunidad de Madrid».