En este centro del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), dos equipos de investigación trabajan en sendos proyectos para encontrar una vacuna frente al SARS-CoV-2.
El ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque, ha visitado este jueves las instalaciones del Centro Nacional de Biotecnología (CNB), del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), situado en el Campus de Cantoblanco de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM), en el que se están llevando a cabo varias investigaciones para hacer frente a la COVID-19, entre ellas dos para desarrollar una vacuna.
Junto a su director, Mario Mellado, el ministro Duque ha conocido de cerca el trabajo de los investigadores del CNB, centrado en siete áreas: desarrollo de vacunas, tratamientos antivirales, generación de anticuerpos para neutralizar el virus, ensayos para evaluar seroprotección, análisis de las proteínas del virus para localizar zonas con potencial terapéutico, análisis de la evolución de la infección en la sociedad, y procesado de imágenes de la estructura de proteínas del virus,
El CNB es un centro de referencia mundial en la investigación de coronavirus. El grupo que lideran los profesores Luis Enjuanes e Isabel Sola lleva más de 30 años estudiando este tipo de virus, con importantes resultados: fueron los primeros investigadores en clonar un coronavirus en el año 2000 y también clonaron el coronavirus del MERS en 2013.
En la visita a la plataforma de vacunas, en la que trabaja este grupo, el ministro ha estado acompañado por los dos profesores. Enjuanes se ha reincorporado al laboratorio una vez se ha confirmado el negativo a la prueba del coronavirus, que resultó positiva el pasado 27 de marzo. El profesor ha permanecido estas semanas trabajando desde casa, asintomático.
Este grupo comenzó a trabajar en enero, una vez se tuvo conocimiento de la existencia de un nuevo coronavirus en China, y puso en marcha el proyecto PIE-CORONAVIRUS para buscar una vacuna, aplicando la experiencia y el conocimiento acumulado en este tipo de virus durante décadas. Su objetivo es estudiar los mecanismos de patogénesis del coronavirus SARS-CoV-2, con el propósito de eliminar de su genoma los genes responsables de la virulencia para obtener derivados atenuados, que representan candidatos a vacuna.
Para ello, trabajan en un clon completo del virus, que, una vez generado, será probado en primer lugar en ratones modificados genéticamente para que puedan enfermar con el COVID-19, que ya se han empezado a generar.
De manera paralela, en el CNB hay otro proyecto en marcha para buscar una vacuna. El ministro ha visitado también el laboratorio del profesor Mariano Esteban, cuyo grupo busca generar vectores virales basados en una modificación del virus usado en la erradicación de la viruela.
Al no emplear el virus SARS-CoV-2 completo, los investigadores pueden trabajar en condiciones de menor nivel de seguridad biológica y, por tanto, se requiere menos complejidad experimental a la hora de desarrollar la vacuna. El equipo de Esteban, que tiene experiencia en el desarrollo de vacunas frente al ébola, el zika o el chikungunya, espera tener un candidato a vacuna a finales de este mes.
Al margen de esto, el CNB también está implicado en otros proyectos de investigación. En concreto, fue seleccionado en la convocatoria exprés de la Comisión Europea para participar en el proyecto ‘Monoclonal Antibodies against 2019-New Coronavirus’ (MANCO), en colaboración con grupos de investigación, compañías biotecnológicas y organizaciones para investigación clínica de Holanda, Alemania y Francia.
Este proyecto, para el que el centro del CSIC recibe 125.000 euros, aprovecha la experiencia de la investigación lograda en otro anterior (IMI-ZAPI), que desarrollaba anticuerpos protectores frente a otro coronavirus (MERS-CoV). Como algunos de los anticuerpos caracterizados reconocían una región de la proteína S conservada en distintos coronavirus, pretende evaluar su eficacia protectora frente al SARS-CoV2. El proyecto permitirá identificar anticuerpos monoclonales para utilizar de forma preventiva o terapéutica en respuesta a la epidemia causada por el nuevo virus.
Además, este centro participa en varias convocatorias internacionales. Entre ellas, ha presentado una propuesta junto al equipo del doctor español Adolfo García-Sastre, del Icahn School of Medicine en Mount Sinai (Nueva York), a Centers of Excellence for influenza research and surveillance (CEIRS)-NIH.
Foto: CSIC