Noticias » Cultura y Ocio » JAZZMADRID19 registró una ocupación media del 91,32%, con más de 46.000 espectadores

JAZZMADRID19 registró una ocupación media del 91,32%, con más de 46.000 espectadores

by Gacetín Madrid
  • El 40% de las propuestas musicales fue protagonizado por mujeres en la programación oficial del festival, un 28,3% más que en la primera edición de 2014.
  • JAZZMADRID fue accesible 100% para personas con movilidad reducida y discapacidad auditiva en las sedes oficiales municipales.

El Festival Internacional de Jazz de Madrid, JAZZMADRID 2019, organizado por el Área de Cultura, Turismo y Deportes del Ayuntamiento de Madrid a través de Madrid Destino, se confirma como un hecho cultural de prestigio, una cita obligada del otoño madrileño, que llama tanto al turismo internacional como al nacional, con una alta valoración por parte de la prensa y de los espectadores.

Su cuidada programación ha seguido fidelizando y consolidando su propio público, como demuestra el hecho de que la edición recientemente concluida congregara a un total de 46.359 asistentes, cifra superior en un 11 % a la registrada en 2018. Otros datos: la ocupación media de los 42 conciertos oficiales fue del 91,32% y en 32 de ellos se colgó el cartel de no hay entradas (76,19%).

En JAZZMADRID19, que se desarrolló entre el 28 de octubre y el 30 de noviembre, con más de 130 conciertos y actividades paralelas, el 40% de las propuestas musicales de la programación oficial fue protagonizado por mujeres, lo que supone un incremento del 28,3% con respecto a la primera edición del festival en 2014.

Se ha constatado igualmente, como tendencia al alza, el interés que despierta el jazz entre los jóvenes, pues la media de edad del público ha estado entre los 20 y los 50 años.

La web del festival registró un incremento de visitas de un 39% más que en 2018. Fue visitada por 137 países de todo el mundo (un 9,6% más que en 2018), Estadounidenses, chinos, británicos, franceses, italianos y mexicanos han sido, por ese orden, los usuarios y aficionados que más tráfico han generado.

Destaca el incremento de visitas por parte de ciudadanos chinos, que ha pasado de 151 en 2018 a 5.678 en esta edición y el incremento del 100% de visitas desde América Latina.

Los seguidores en redes sociales oficiales del festival ascendieron en Facebook (un 13% más que en 2018) y Twitter (un 22% más que en la edición anterior), además del despegue en Instagram.

El firme compromiso con la accesibilidad fue una realidad en los conciertos y actividades de las sedes oficiales municipales, completamente accesibles a las personas con movilidad reducida y discapacidad auditiva a través de la instalación de bucle magnético y, en algunas ocasiones, el uso de mochilas vibratorias. Además, se utilizó la lengua de signos en todas las conferencias.

Récord en el número de espectadores: 46.359 en 2019 frente a los 41.752 de 2018

En los 42 conciertos oficiales que tuvieron lugar en los escenarios del Teatro Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa, CentroCentro, Centro Cultural Conde Duque, Auditorio Nacional de Música, Instituto Francés, Sala Clamores, Sala Galileo Galilei y Auditorio Casa del Reloj (hubo 21.476 espectadores en total.

A los 48 conciertos programados por La Noche en Vivo acudieron 6.330 personas. Los diferentes escenarios que han formado parte de la programación paralela de JAZZMADRID 2019, como el Centro Cultural Conde Duque (1.976 espectadores en sus 9 conciertos), el Círculo de Bellas Artes (527 espectadores en 4 conciertos), el Ciclo de Jazz en Ciudad Lineal (1.243 asistentes a sus 5 conciertos), el programa “Jazz en los Distritos” (4.011 espectadores en 19 conciertos) y AC Recoletos Jazz (870 espectadores en 15 conciertos, todos ellos con aforo completo) consiguieron reunir a más de 6.600 espectadores.

Actividades complementarias a los conciertos, como las conferencias en CentroCentro, la Biblioteca Nacional de España, el Ciclo de Jazz Ciudad Lineal y el Colegio Mayor Universitario Fundación SEPI; la exposición de fotografía de ediciones anteriores de JAZZMADRID a cargo de Álvaro López del Hierro, instalada en el vestíbulo del Teatro Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa; la actuación de danza de Lucía Marote en CentroCentro; las proyecciones cinematográficas en el Círculo de Bellas Artes, el Centro Cultural Conde Duque y el Ciclo de Jazz Ciudad Lineal; y el ensemble de poetas y músicos en la Sala Ámbito Cultural de El Corte Inglés convocaron en su conjunto a 11.967 espectadores.

Calidad por encima de todo

Al margen de las cifras, el festival ha destacado por su calidad. JAZZMADRID 2019, promovido por el Área de Cultura, Turismo y Deporte, ha dado la oportunidad de descubrir nuevos creadores junto a otros ya consagrados.

Asimismo, mantuvo una programación estilísticamente equilibrada y plural que volvió a reunir a los artistas más relevantes del panorama jazzístico español, quienes compartieron cartel con reconocidos nombres de la escena internacional.

Todo ello ha seguido situando a Madrid en el mapa del jazz europeo, codo con codo con citas tan veteranas y enjundiosas como las de Umbría en Italia, Montreux en Suiza o el Jazzaldia de San Sebastián.

Jazz para todos los públicos

Un festival de ciudad y para la ciudad, en cuyo desarrollo volvió a ser posible degustar jazz de ámbito y destino internacionales, como el que elaboraron figuras como Herbie Hancock, Joe Lovano, Mike Stern, Charles Tolliver, Dirty Dozen Brass Band, las cantantes Youn Sun Nah y Stacey Kent, o el dúo formado por John Scofield y Jon Cleary, mientras que en circuitos como los del Festival de Jazz de Ciudad Lineal, «Jazz en los Distritos”, Instituto Francés o Círculo de Bellas Artes -los cuatro estrechos colaboradores de esta gran cita desde sus inicios, los programas se concentraron en ofrecer lo mejor del panorama local: ejemplo de ello fueron las actuaciones del pianista Pedro Ojesto, el contrabajista Pablo Martín Caminero, el grupo de flautistas Quartetazzo, el pianista Maher Beauroy, la cantante Myriam Latrece o el saxofonista Iñaki Arakistain, entre otros. Con respecto a Conde Duque -colaborador en esta edición-, destacaron las actuaciones de Nubya García, David Virelles o el dúo formado por Peter Brötzmann y Heather Leigh.

Jazz fronterizo e instrumentistas de prestigio

En Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa y CentroCentro, sedes ambas principales de la sección oficial de JAZZMADRID, la programación reservó al público sorpresas de incontestable contenido fronterizo o, si se desea, aventurero, en comparecencias de artistas y grupos como Myra Melford, Christian Scott, Mina Agossi, Kontxi Lorente, Giovanni Guidi o Susan Santos, además de los ya mencionados Charles Tolliver y Joe Lovano.

Eclecticismo y world jazz

La vocación estrictamente ecléctica que inspira JAZZMADRID se hizo muy evidente en diferentes espacios del festival, a través de los conciertos que protagonizaron las cantantes Rebekka Bakken y Noa Lur, la última inscrita en la sección del festival que atiende a la educación musical jazzística de los niños.

Y aún quedó espacio en el programa para que algunos creadores pertenecientes a ese modelo de jazz que viste de libertad sonora la música popular de cualquier rincón del planeta expresasen sus más recientes inquietudes.

Fue una ocasión única para comprobar las calidades de los últimos proyecto del pianista cubano Roberto Fonseca, de la cantante coreana Youn Sun Nah, del pianista antillano Maher Beauroy, así como la de las estampas flamencas que adornan la música de la flautista María Toro, la del contrabajista Javier Colina, la del supertrío compuesto por Carles Benavent, Tino Di Geraldo y Jorge Pardo, la del proyecto Flamenco Trane, de Guillermo McGill, así como la de los ya mencionados Ojesto y Martín Caminero.

Clasicismo: jazz moderno de siempre

Sin embargo, puestos a degustar la sonoridad del mensaje del clasicismo en el jazz, lo mejor para muchos aficionados fue acudir a conciertos como los de la pianista Eliane Elias, el nuevo grupo del contrabajista Ron Carter, Wallace Roney, Marc Ribot, el proyecto Paper Man de Charles Tolliver y Jesse Davis, o el más reciente del pianista Herbie Hancock, todos elaborando un jazz moderno de cualquier época.

Misma filosofía, idéntica intención que la que impregnó la música con la que las escuelas de Madrid presentaron a nuestras estrellas del mañana, componentes en estos momentos de las Big Bands de los Conservatorios de Arturo Soria y Amaniel y de la Escuela de Música Creativa, las tres presentes también en esta sección oficial de la programación de JAZZMADRID.

Divas del jazz y emergentes

Algunos nombres ya se mencionaron: Stacey Kent, Youn Sun Nah, Rebekka Bakken, Myra Melford o Eliane Elias, por ejemplo.

Sin embargo, la importancia de las cantantes Lizz Wright, Karrin Allyson o Camille Bertolt es tan singular que merecerían capítulo aparte. Por sí mismas, su presencia resumió a la perfección la intención que rige en esta nueva etapa del Festival Internacional de Jazz de Madrid desde hace seis años; esencialmente, que el jazz hecho por mujeres no siga pasando por los festivales sin dejar otro rastro que el de un apunte.

De este modo, mujeres instrumentistas, que lideran sus propios grupos, que rompen estereotipos ocupan por derecho propio el lugar que les corresponde en el festival.

Las oportunidades para los grupos emergentes, una de las señas de identidad del festival,  se vieron incrementadas en esta edición con la inclusión de las dos residencias artísticas en Conde Duque (Láser Kids y Lucía Rey), al tiempo que se iniciaba una nueva línea de colaboración con la que posiblemente sea la escuela más veterana y prestigiosa de jazz de nuestro país: el Taller de Músics de Barcelona, dirigido por el reputado multiinstrumentista cubano Omar Sosa, docente por añadidura en aquella escuela catalana.

La casa del blues

Hay pocos estilos en la música popular que hayan alcanzado la edad y el calado del blues, y, sin embargo, no suele tener casa propia y encuentra refugio natural en toda clase de programas de jazz. Desde el arranque de JAZZMADRID, el blues ha sido parte de su programación, y esta vez no fue diferente.

Vinieron por ello el nuevo grupo de la teclista de Nueva Orleans Marcia Ball, y la banda del guitarrista-organista Lucky Peterson, que celebraba los cincuenta años sobre la escena. Y también visitó la escena de CentroCentro la ya mencionada cantante y guitarrista Susan Santos.

Nuestro jazz

Una propuesta local de blues esta última, que volvió a confraternizar en JAZZMADRID con las del jazz, que, en esta edición, siguió haciendo una apuesta muy clara por diferentes artistas, llevándolos hasta el Fernán Gómez. Centro Cultural de la Villa, un aforo, en fin, mayor del que acostumbran a frecuentar. Allí estuvo la formación del proyecto Flamenco Trane, de McGill y Sambeat, y el pianista Moisés P. Sánchez, que cerró, además, el festival a modo de declaración de intenciones, como ya sucediese en años anteriores con Ximo Tébar, Jorge Pardo o Javier Colina.

Jazz local cuya oferta completaron los conciertos de la pianista Kontxi Lorente, la cantante Noa Lur, así como otros personajes ya citados, como el trío Benavent, Di Geraldo & Pardo, Ojesto, Martín Caminero o los grupos en Residencia en Conde Duque.

Apretada agenda de actividades paralelas

Así ha sido, en esencia, el cartel de la nueva edición de JAZZMADRID, que, además de volver a disponer de un carácter cambiante y vivo, localizó esta vez hechos diferenciales en la celebración de una mesa redonda acerca del «Jazz y los medios de comunicación»; varias conferencias pronunciadas por diferentes profesionales y estudiosos del jazz (una de ellas en la Biblioteca Nacional de España); un ciclo cinematográfico acerca del documental musical en Conde Duque; un homenaje poético al legado de Thelonious Monk, Miles Davis, Coltrane, Chet Baker y Sheila Jordan; una exposición fotográfica en Fernán Gómez, y un nuevo apartado de Danza protagonizado por la coreógrafa Lucía Marote, homenajeando el mundo de Ella Fitzgerald.

Con esta sofisticada estructura sonora, JAZZMADRID sigue configurándose como uno de los mejores certámenes subalpinos que el jazz es capaz de producir. Y, con todo, lo más importante acaso siga siendo el hecho de que se trata de un festival apegado al terreno que ocupa y que, seguro, no podría conocer desarrollo igual en otra parte.

You may also like

Leave a Comment