La consejera de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Eugenia Carballedo, ha visitado hoy una de las últimas sastrerías taurinas del mundo, el taller Fermín, conocido por su confección de vestidos de luces y un negocio familiar que, desde su inauguración en 1963, ha realizado de forma artesanal los trajes de los toreros más importantes del escalafón taurino.
Carballedo ha conocido de primera mano tanto el funcionamiento de este espacio como las costumbres, tradiciones e historia en torno a la moda taurina.
Así, ha comprobado cómo se trabaja en las distintas secciones del taller, desde la recepción de clientes y toma de medidas; la comunicación con estos y con los proveedores; el cosido y bordado; y por último lugar, el planchado de la pieza.
“La sastrería Fermín lleva 56 años confeccionando estas obras de arte y son, sin duda, un ejemplo de cómo se deben conservar nuestras tradiciones y el valor artístico y cultural que envuelve la fiesta del toro”, ha dicho la consejera tras la visita.
Además de la confección, este local que regenta Antonio López Fuente, conocido como el Sastre de la Luz, se dedica a la reparación de todo cuanto tiene que ver con la indumentaria del torero, tanto trajes como monteras así como capotes de paseo y toreo.
El trabajo que realizan los 11 empleados en el taller es prácticamente artesanal (corte, patrón, coser lentejuelas, bordados y montaje) y solo escapan al carácter manual detalles como las jaretas.
Como curiosidades sobre la confección del vestido de luces destacan el tiempo que se tarda en elaborar esta prenda, unas 150 horas; el peso que tiene, 5 kilos; o que para su composición se emplean elementos de distintas culturas, como la árabe, judía o cristiana.
Entre las grandes figuras del toreo que han pasado por este histórico taller se encuentran Miguel Ángel Perera, El Juli, Morante o José Tomás. Para este último confeccionaron el vestido de luces con el que toreó en Nimes en 2012, cuando cortó 11 orejas y un rabo.