- El Ayuntamiento de Madrid ha instalado 50 señales en los puntos de incumplimiento más frecuentes.
- 35 señales recuerdan la prohibición de orinar en la vía pública con el texto ‘Multa también empieza por M´.
- Otras 15 se han instalado en las ubicaciones en las que está prohibido tocar música en la calle.
- Ambos modelos indican expresamente las multas económicas a las que se pueden enfrentar las personas infractoras.
El Ayuntamiento de Madrid ha instalado 50 señales en el distrito de Centro para fomentar el civismo ciudadano y evitar comportamientos prohibidos en la vía pública. En concreto, 35 de ellas recuerdan que está prohibido orinar en la calle y otras 15 se han ubicado en lugares en los que está prohibido tocar música.
La instalación de estas señales es un refuerzo de las actuaciones de sensibilización, control y disciplina que viene desarrollando el Ayuntamiento de Madrid para minimizar el impacto del ocio en la vida diaria de las personas residentes en el distrito.
Prohibido orinar en la vía pública
Con el texto ‘Multa también empieza por M’, las señales informan, además, de que este comportamiento representa una infracción de la Ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos que se sanciona con multas económicas que van desde los 751 euros hasta los 1.500 euros.
La ubicación de las 35 señales no es arbitraria. Para su colocación se ha tenido en cuenta al Servicio de Limpieza Urbana del Ayuntamiento de Madrid, que ha detectado en qué puntos del distrito se produce este tipo de comportamientos incívicos con más frecuencia. La calle Barceló, la plaza del Dos de Mayo, la calle del Codo, la plaza de Arturo Barea o la de Jacinto Benavente, son algunas de las localizaciones escogidas.
Además, por tercer año consecutivo, se han instalado aseos públicos en el parque Casino de la Reina, plaza de Lavapiés, plaza de La Corrala, plaza Juan Goytisolo, plaza Nelson Mandela, plaza Arturo Barea, plaza de la Cebada, plaza Gabriel Miró, plaza de los Carros, calle Barceló, calle Palma esquina con calle San Bernardo, calle Daoiz esquina con calle San Bernardo, plaza Zerolo, calle San Lucas, plaza Cibeles, plaza Neptuno, calle Espoz y Mina con calle La Cruz y calle Atocha. Todas estas ubicaciones han sido consensuadas con las asociaciones de vecinos La Corrala, Cavas-La Latina, y Sol y Barrio de Las Letras.
La puesta en marcha de esta medida proviene de un mandato ciudadano a través de una propuesta de Presupuestos Participativos de 2016 que solicitaba más urinarios públicos.
‘La música nos gusta pero aquí molesta’
En total, 15 placas con el eslogan ‘La música nos gusta pero aquí molesta’ han sido colocadas en 8 plazas del distrito: Dos de Mayo, Chueca, Pedro Zerolo, Santa Ana, Mayor, Ramales, Santiago y San Ginés.
Estas ubicaciones están excluidas de los espacios en los que se puede tocar música en el distrito Centro, que cuenta con una regulación específica para esta actividad y que, junto con la normativa medioambiental, pretende ponerla en valor como actividad cultural y al mismo tiempo evitar molestias a los residentes.
Esta medida ha sido consensuada con colectivos de músicos y representantes vecinales y establece diferentes tipos de ubicaciones y horarios para poder tocar, respetando en todo caso los límites sonoros establecidos en la declaración de Zona de Protección Acústica Especial.
Las 15 señales se han instalado en zonas en las que no está permitido tocar y que se han identificado como los puntos de incumplimiento más frecuentes.
Por eso, esta señalética también recoge los artículos de la Ordenanza de Protección contra la Contaminación Acústica que establecen que las actuaciones musicales sin autorización suponen una infracción que se sanciona con multa económica de hasta 750 euros y la retirada de los equipos de amplificación.