- El 10 de junio de 1981, la banda terrorista asesinó al policía municipal Carlos Hernández y en su homenaje se ha colocado una placa en la calle Fernando el Católico, en el edificio donde trabajaba y perdió la vida.
- El Ayuntamiento de Madrid da cumplimiento al acuerdo plenario de colocar placas donde se hubieran producido atentados terroristas con resultado de muerte.
En la calle Fernando el Católico número 56, en el distrito de Chamberí, se ha instalado esta mañana una placa en recuerdo a Carlos Hernández Díaz, policía municipal del Ayuntamiento de Madrid que fue asesinado en atentado terrorista por el GRAPO, el 10 de junio de 1981, en este mismo emplazamiento.
El suceso ocurrió en el transcurso de un atraco que los terroristas perpetraron en una oficina de recaudación de arbitrios municipales en cuya dependencia prestaba sus servicios la víctima. También resultó herida una ciudadana mientras realizaba unos pagos en esa oficina.
La ceremonia de recuerdo ha comenzado con unas palabras pronunciadas por la concejala de Chamberí, Esther Gómez, que ha asistido al acto acompañada por la delegada de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, Marta Higueras, junto a otros miembros de la Corporación madrileña y de la Policía Municipal. Todos han querido acompañar a familiares de la víctima en el homenaje que ha concluido con un minuto de silencio.
Carlos Hernández Díaz, madrileño de 45 años, estaba casado y tenía dos hijos. Era policía municipal y pertenecía a la Tenencia de Alcaldía de Chamberí aunque en esos momentos se encontraba prestando sus servicios en la oficina de recaudación de arbitrios municipales correspondiente al barrio de Universidad.
Acuerdo del Pleno del Ayuntamiento
La colocación de la placa responde al cumplimiento del acuerdo adoptado por el Pleno del Ayuntamiento de Madrid de 28 de mayo de 2014, en el que todos los grupos municipales decidieron por unanimidad colocar placas conmemorativas en lugares de la ciudad de Madrid en los que se hubieran producido atentados terroristas con resultado de muerte.
Esta es la segunda de las placas que se instala en Chamberí en memoria de personas fallecidas en atentados acaecidos en el distrito.