La Comunidad de Madrid ha reclamado al Gobierno central que inicie la construcción del nuevo carril Bus-VAO de la A-2, una infraestructura que el Gobierno regional considera «imprescindible» y «sobre la que el nuevo Gobierno central aún no se ha pronunciado».
Así lo ha señalado la consejera de Transportes, Vivienda e Infraestructuras, Rosalía Gonzalo, tras la reunión de trabajo que ha mantenido este miércoles con el alcalde de Torrejón, Ignacio Vázquez, para hablar de las necesidades que presenta el municipio en materia de transportes.
Gonzalo ha querido subrayar que este carril «es un proyecto clave para mejorar la movilidad de los vecinos del Corredor del Henares», que cuenta con los informes favorables de las distintas administraciones implicadas y que su puesta en marcha está pendiente únicamente de la firma del convenio entre Ministerio de Fomento, Dirección General de Tráfico (DGT), Comunidad de Madrid y Ayuntamiento de Madrid.
La consejera ha señalado que «desde el Ministerio no se ha hecho mención a la firma de este convenio», por lo que ha solicitado al ministro “que aclare si su departamento tiene intención de dar continuidad a este proyecto”.
El nuevo carril Bus-VAO «aportaría una solución a los atascos que diariamente sufren los vecinos del Corredor del Henares sobre todo en hora punta, de tal forma que los usuarios que utilicen este carril podrán ahorrar hasta 15 minutos en un trayecto cuya duración media actual es de 40 minutos».
En total, más de 15.000 usuarios se podrán beneficiar de este proyecto, que supondrá un ahorro para los madrileños de 500.000 horas al año y que contribuirá a la mejora de la calidad del aire evitando la emisión de hasta 900 toneladas de CO2 al año.
Tal y como está recogido en el protocolo de actuación, el carril se controlará mediante un sistema de ‘Gestión Inteligente de la Carretera’ (ITS), que permitirá activarlo o desactivarlo en tiempo real en función de las necesidades que presente el flujo de vehículos en cada momento. El sistema está dotado con tecnología de última generación como balizamientos luminosos en la vía y señalización dinámica por lo que, a diferencia del existente en la A-6 (carretera de La Coruña), en este caso no existirá separación física entre este carril y el resto de carriles de la calzada.
Tendrá una longitud de 19 kilómetros y partirá a la altura de la M-300, entre los municipios de Torrejón de Ardoz y Alcalá de Henares, para finalizar en el intercambiador de Avenida de América, cubriendo una distancia de 19 kilómetros.
Los puntos de acceso a este carril estarán situados en Alcalá de Henares, Torrejón de Ardoz, San Fernando de Henares, el barrio de Canillejas en Madrid y el intercambiador situado en la Avenida de América.