- Desde hoy se puede consultar en la web municipal.
- Habrá un mes para presentar alegaciones antes de su aprobación definitiva.
- Esta revisión permite actualizar los objetivos de calidad acústica, que databan de 2009.
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado inicialmente este jueves, 13 de septiembre, el nuevo mapa de Áreas Acústicas de la ciudad de Madrid, que establece los límites de ruido que debe tener cada zona en función de las actividades que se realizan en ella. Tras su publicación en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid, estará un mes en información pública.
La primera delimitación de las Áreas Acústicas realizada data de 2009. Ahora, y antes de cumplirse el plazo establecido en la legislación nacional para su revisión, el Ayuntamiento de Madrid ha actualizado dichas Áreas Acústicas con el objetivo de reflejar los cambios que se han producido en la ciudad.
Esta revisión, por tanto, ha permitido actualizar los objetivos de calidad acústica que deben alcanzarse en cada punto de la ciudad, con la corrección de errores que se hayan detectado y con la principal novedad de los nuevos desarrollos urbanísticos que se hayan concretado con posterioridad a las vigentes áreas acústicas.
Estas áreas se clasifican en atención al uso predominante del suelo, actual o previsto, y su delimitación se ha hecho siguiendo un criterio de homogeneidad y evitando una excesiva fragmentación del territorio. En cada área acústica deberán respetarse, por cada emisor acústico, los valores límite de emisión que hagan posible el cumplimiento del correspondiente objetivo de calidad acústica.
Áreas Acústicas clasificadas por el uso del suelo
Para realizar esta revisión se han utilizado, como datos de partida, la información sobre los usos del suelo proporcionada por el Área de Gobierno de Desarrollo Urbano Sostenible, el visualizador urbanístico y la cartografía del Ayuntamiento de Madrid, las orto-imágenes del Instituto Geográfico Nacional, así como la información recabada en las visitas de campo llevadas a cabo en aquellas situaciones donde no ha sido posible determinar el uso del suelo mediante ninguno de los medios anteriores.
De esta forma, aplicando los criterios y directrices establecidas en la normativa sectorial, y primando siempre la protección al receptor más sensible, se han delimitado las áreas acústicas de la ciudad, correspondientes a los usos: sanitario, docente y cultural; residencial; terciario; industrial y sistemas generales de infraestructuras de transporte.
Como mejora respecto a la vigente delimitación, la nueva se ha llevado a cabo con un mayor nivel de detalle. La delimitación ha dado como resultado que más de la mitad de la superficie urbanizable del municipio se encuentra dentro de los tipos de áreas acústicas más exigentes, es decir, en los que los objetivos de calidad acústica son más restrictivos, representando las áreas residenciales el 57,8% y las sociosanitarias el 2% del territorio.
Otra de las novedades es que, ahora, se presentan individualmente y de forma diferenciadas las áreas acústicas correspondientes a cada uno de los 21 distritos que forman la ciudad; desde hoy se pueden consultar en la página web del Ayuntamiento www.madrid.es en un formato accesible para su consulta.
La representación gráfica de las Áreas Acústicas constituye una herramienta fundamental en la gestión ambiental del ruido en la ciudad, ya que representa la distribución espacial de los objetivos de calidad acústica y, junto con la cartografía del ruido (Mapa Estratégico de Ruido y cartografía de ocio nocturno), permite detectar las zonas de la ciudad en las que es necesario adoptar medidas para la mejora del medio ambiente acústico.
De esta forma, la calidad acústica pasa a ser una variable más a considerar en la planificación urbanística de la ciudad, contribuyendo al diseño de ciudades más sostenibles y adaptadas a la capacidad acústica del territorio, al tenerse en cuenta los aspectos acústicos en las fases de diseño y ordenación del territorio o del uso del suelo, así como en los proyectos de rehabilitación que se puedan llevar a cabo.
Se trata de tener una visión proactiva de la Planificación Urbanística, evitando los problemas de convivencia relacionados con el ruido antes de que aparezcan.