La actividad ilícita consistía en conseguir terminales móviles y activar las líneas de voz y datos para, tras falsificar los contratos, facilitar su venta de manera fraudulenta en tiendas de compra venta o incluso en Rumanía.
Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización criminal internacional que habría estafado 150.000 euros a grandes compañías de telecomunicación. La actividad ilícita de la organización consistía en conseguir terminales móviles, activar las líneas de voz y datos y finalmente obtener los correspondientes contratos para facilitar su venta, todo ello de manera fraudulenta.
La operación ha concluido con la detención y posterior puesta a disposición judicial de 10 personas de nacionalidad rumana. La operación comenzó cuando investigadores de la Policía Nacional identificaron una sofisticada red criminal que operaban de manera fraudulenta con terminales y líneas de telefonía móvil.
La organización tenía un claro reparto de tareas. El modus operandi se dividía entre los denominados conseguidores, encargados de obtener terminales móviles de alta gama y los activadores que daban el alta a las líneas de voz y datos.
Seguidamente lograban los oportunos documentos de identidad y contratos falsificados necesarios para complementar las dos primeras labores. El último paso consistía en la venta de los terminales, preferentemente en tiendas de compra-venta de artículos de segunda mano o incluso sacarlos del país para su comercialización en Rumanía.
Las pesquisas se dilataron durante meses debido a las medidas de seguridad que emprendían los integrantes de la red cambiando en numerosas ocasiones de domicilio en España y con continuos viajes a Rumanía, dificultando así su localización.
Las víctimas del fraude son grandes compañías de telefonía
Las principales víctimas de estos hechos delictivos son grandes operadoras y distribuidoras de telefonía en España, quienes han sido víctimas de un fraude superior a 150.000 euros.
La operación ha culminado con la detención de 10 ciudadanos rumanos y con el registro de cuatro viviendas en la provincia de Madrid en los que han sido aprehendidos, entre otros efectos, 25 móviles de alta gama, decenas de tarjetas SIM y dos vehículos de gran cilindrada. Todos los arrestados han sido puestos a disposición de la autoridad judicial.