La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid del pasado 4 de abril aprobó nombrar a la plazuela situada entre las calles San Lucas y San Gregorio, en el barrio de Chueca del madrileño distrito de Centro, como Plaza de la Memoria Trans.
Finalmente la inauguración de la Plaza de la Memoria Trans prevista para este jueves se aplaza al sábado, 19 de mayo, a petición de diversos colectivos implicados, que solicitaron que fuera en fin de semana para facilitar la asistencia y la visibilización del evento, que contará con la instalación de una placa en recuerdo a las víctimas trans, como el conocido caso de Alan, joven de 17 años que decidió suicidarse ante el acoso que sufría desde los 14.
En su sesión de abril de 2017, el Pleno del distrito Centro aprobaba por mayoría con los votos a favor de los grupos municipales Ahora Madrid, Ciudadanos y PSOE “instar al órgano competente a que la plaza ubicada al final de la calle San Gregorio con calle San Lucas, en el barrio de Chueca, se pase a llamar Alan Oliveira Costa, en memoria del adolescente transexual que se suicidó el pasado 24 de diciembre de 2015”.
Se trataba de una iniciativa para que esa plaza, que carecía de denominación en el callejero municipal, se convirtiese en un lugar de reivindicación de los derechos LGTBI en la ciudad. Un colectivo que todavía, a día de hoy, sufre agresiones y es víctima del odio y la intolerancia.
Situada en Justicia, a pocos metros de la plaza de Chueca, este recoleto rincón se ubica en el corazón de un barrio que no se entiende sin el colectivo LGTBI, al que acogió como refugio en los años 70. Primero desde la represión y después desde una libertad recién estrenada que les fue permitiendo conquistar espacios y derechos año tras año, hicieron de Chueca su sello de identidad y transformaron el barrio en lo que es hoy: un lugar cosmopolita y abierto de fama internacional reconocido por su atractivo cultural.
Una denominación colectiva que reconozca a todas las víctimas de la violencia trans
“Pese a los grandes avances logrados en los últimos años, sigue siendo necesario visibilizar la lucha de las personas que son víctimas de transfobia en las calles, en los colegios e incluso en sus propias familias”, reclaman. Por ello, y con el consenso de las asociaciones que luchan por los derechos de las personas LGTBI, se acordó otorgar a la plaza una denominación más colectiva que reconociese a todas las víctimas de la violencia trans.
De acuerdo con la Ordenanza reguladora de la denominación y rotulación de vías del Ayuntamiento de Madrid, el procedimiento debía iniciarse de oficio por el concejal presidente del distrito donde se encuentra la vía o espacio urbano en cuestión, bien a iniciativa propia o como consecuencia razonada de otros órganos municipales.
De esta forma, el Pleno del distrito Centro de septiembre de 2017 aprobaba por mayoría de los mismos grupos municipales la propuesta del concejal presidente de elevar “a la Junta de Gobierno de la Ciudad de Madrid, la asignación del nombre de “Plazuela de la Memoria Trans” al espacio urbano sin denominación, situado en la confluencia de las calles San Gregorio y San Lucas, en el Distrito Centro”.
Y finalmente, el pasado miércoles, 4 de abril, la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid aprobó el acuerdo adoptado por el Pleno de Centro. La placa que le da nombre se instalará en un acto público este jueves, 17 de mayo, Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, que conmemora que en esa misma fecha del año 1990 la Organización Mundial de la Salud eliminó la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales.