«El crecimiento se tiene que trasladar al empleo y mejorarse las oportunidades de las personas que están fuera del mundo laboral», señala CCOO.
Los datos de paro registrado en la Comunidad de Madrid arrojan un descenso de 9.461 personas, situando el número de personas desempleadas en la región en 370.590. Un descenso «positivo pero insuficiente, teniendo en cuenta que abril ofrece normalmente buenos datos para el empleo», denuncia CCOO.
El descenso interanual, de 26.861 personas, es la mitad de lo que se redujo el año pasado y el más bajo desde 2014. Con respecto a lo que va de 2018, y puesto que los dos primeros meses del año supusieron un retroceso, al finalizar abril, Madrid tiene 600 personas más inscritas como paradas que al terminar 2017.
El paro se redujo en la Comunidad de Madrid un 2,49% en el mes de abril, dato inferior al 2,53% que bajó en el resto del Estado. Siendo positivo, CCOO alerta de que «la recuperación del empleo es lenta, reduce el ritmo con respecto a los años anteriores y tiene un marcado carácter estacional».
Un dato que «se confirma con el número y tipo de contratos: 214.453 contratos firmados en el mes de abril, de ellos el 80,74% temporales y están motivados por una elevada rotación y estacionalidad, no por un incremento de la actividad. Es además un dato que empeora en los últimos meses y que va en la línea de los datos conocidos la semana pasada de la EPA, que reflejan un incremento de la temporalidad de un punto».
CCOO señala que «otro elemento negativo en la evolución del desempleo es la brecha de género. De las 9.461 personas que abandonaron el desempleo en abril, 5.730 eran hombres (casi dos de cada tres) frente a 3.731 mujeres, de manera que el peso de las mujeres entre las personas desempleadas aumenta 0,5% en un contexto en el que también la EPA indica que la tasa de actividad femenina ha bajado en el último trimestre. Respecto a la edad de las personas en desempleo, entre los menores de 25 años el número de personas desempleadas se redujo en 3,9%, frente al 2,4% de los mayores de esa edad».
Y en cuanto a sectores, el paro bajó más en servicios (7.571 personas) seguido de la construcción, con 1.337 parados menos. Porcentualmente, sin embargo, el sector que mejor dato aporta es la construcción (-4,05% de bajada del paro en abril), seguido de servicios (-2,57%) y la industria (que con un 1,9% está por debajo de la media de los sectores).
La afiliación a la Seguridad Social en el mes de abril arroja un dato positivo, al crecer en más de 14.000 personas y situarse por encima de los 3,1 millones. Respecto a la protección por desempleo (datos de marzo) se ha reducido en casi 2.000 personas situándose en 176.700 personas, de ellos 102.267 tienen una prestación contributiva.
«Madrid arrastra un problema de baja cobertura a las personas en situación por desempleo que se suma al peso del paro de larga duración, sobre todo entre las personas mayores y mujeres, personas que tienen pocas oportunidades laborales y que han agotado todas sus prestaciones. Las personas demandantes de empleo que no tienen ni un puesto de trabajo ni una prestación (demandantes de empleo no ocupados sin prestación) supusieron en Madrid 221.208», expone el sindicato.
Por ello para CCOO de Madrid «es importante contar cuanto antes con un marco de protección a las personas desempleadas que clarifique e incremente el paraguas de prestaciones, poniendo fin a la incertidumbre que genera la finalización del PREPARA y PAE y con una mejora en el acceso y duración a las prestaciones, que debe abordar el Gobierno del Estado».
Respecto a Madrid, CCOO demanda «un nuevo marco político, que permita la estabilidad y la regeneración democrática, impulsando el diálogo social para dar soluciones a los retos que tiene la región: en primer lugar, el crecimiento de la actividad, basado en sectores diversos y que aporten valor añadido y no en actividades estaciones. En segundo lugar, el traslado del crecimiento al empleo, tanto en cantidad de empleos generados como en calidad. Por último, la protección y la mejora de las oportunidades para aquellas personas que siguen alejadas del mundo laboral, especialmente parados de larga duración y mujeres».