El pasado 14 de septiembre el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictaminó que los trabajadores y trabajadoras temporales interinos tienen derecho a una indemnización en caso de extinción del contrato, equiparándolos, así, a trabajadores de carácter indefinido.
Para Ahora Madrid, «esto ha abierto las puertas a nuevas reivindicaciones que mejoren la precariedad laboral de cara a una mayor estabilidad. Las políticas laborales en los últimos años, agudizadas por los recortes del Partido Popular, ha supuesto una precarización y un aumento de la temporalidad en los trabajadores públicos. No convocar oposiciones ha llevado a cubrir plazas con trabajadores temporales o, en algunos casos, a convertirlos en interinos, enquistando la temporalidad. En la actualidad cerca de 300.000 personas se ven afectadas en todo el Estado. En la sanidad pública madrileña, el 37.7% de los trabajadores y trabajadoras son interinos o eventuales».
«La precarización de los profesionales sanitarios es una de las causas del empeoramiento de la asistencia sanitaria. Sólo manteniendo la calidad laboral de todos los profesionales implicados conseguiremos una sanidad auténticamente de calidad», explican desde la formación política. Por eso Ahora Madrid «ha querido sumarse a una reivindicación legítima que compartimos, porque sólo apostando por los servicios públicos de calidad atenderemos a las necesidades de nuestros vecinos y vecinas».
Rommy Arce, concejala del Distrito de Usera y de Arganzuela, y Javier Barbero, delegado de Salud, Seguridad y Emergencias, han querido estar presentes hoy en el encierro en el Hospital 12 de Octubre, junto con diputados, diputadas y senadores de Podemos, reivindicando «mejoras laborales a los trabajadores y trabajadoras sanitarios que repercutirá en la mejor atención en la salud pública madrileña».
El Concejal de Salud, Javier Barbero, ha recordado que desde su área «se está trabajando en la planificación de plantilla del SAMUR para que, en corto espacio de tiempo, podamos contar con un plantel de profesionales suficiente que pueda dar respuesta a los altos estándares de calidad que el SAMUR se quiere dar a sí mismo».